El empate duele, pero sirve

El empate de Pizarro cayó como una patada al hígado, pero viéndolo con frialdad, el resultado final no fue un mal negocio. Futbolísticamente la ‘U’ sigue en debe y en tales condiciones, un punto en el Cusco alcanza para respirar. Viene Aurich que acaba de bajarse al campeón con una goleada contundente y cinco días después tocará el clásico de visita. La crema tiene argumentos para pelear todos los partidos, pero de ahí a ganarlos hay todavía un trecho muy largo.Duele que el rival te empate con tanta rapidez con un gol evitable. También que en la jugada siguiente se pierda un mano a mano que pudo ser definitivo. Pero frente a un rival flojito, que hizo del pelotazo su principal arma de ataque, Universitario careció de argumentos para hacer algo más que aguantar durante buena parte el partido. La adición de un volante de marca -Josimar Vargas- no mejoró el equilibrio en la mitad de la cancha. Los laterales (Saco Vértiz y Chávez) fueron una puerta abierta y en el centro Alloco y Duarte se comportaron con la solidez de un castillo de arena en un día de marea alta. Un equipo cortado y demasiado largo, que perdía la pelota con rapidez, le permitió a Cienciano mandar y sembrar peligro, aunque con escasa profundidad.
Todo cambió a mediados del segundo tiempo. Los cusqueños se cansaron y Christofer Gonzales ya pudo recibir la pelota y voltear con libertad. Rainer tomó las riendas del partido y en el banco hubo una buena lectura de lo que sucedía: entró Gómez para sustituir a un inexpresivo Saco Vértiz y luego Olascuaga para tocar y gambetear (su enganche previo al gol nos tapó la boca a todos). El partido estuvo a la mano. Edwin parecía un velocista, Rainer metía y metía como si tuviera tres pulmones. Hasta Chávez levantó su nivel por derecha. Otra vez, sin embargo, la falta de equilibrio nos jugó una mala pasada y Pizarro aprovechó la poca agresividad en la marca de Alloco.
Aurich es un equipo mejor armado que este pálido Cienciano. Tiene un arquero experimentado (Delgado), atraque (Rojas), una buena manija (Guevara), inventiva (Sánchez) y un delantero peligroso (Noronha). Posee, además, algo que extraña la ‘U’: funcionamiento colectivo.
¿Qué hacer? Gómez debe ser titular; el intermitente Guastavino podría volver tras superar su lesión. Tajima, quien tampoco viajó al Cusco por un golpe, estaría a la orden, lo mismo que Galliquio. ¿Y Leguizamón? Las razones de su ausencia siguen siendo un misterio.
Las alternativas a mano no garantizan la mejora radical que requiere el equipo. Sin espacios, la crema sufre. La falta de movilidad de sus hombres torna improductivo el traslado del balón y el poco peligro que genera es fruto de acciones individuales. San Rainer pelea, se multiplica, rompe líneas, pero por momentos deja la sensación de que luchara solo.
La principal aspiración de Universitario debería ser convertirse en un equipo ordenado. Solo a partir de ello puede potenciar sus mejores armas. Si no lo hace, continuará siendo el once desequilibrado que hemos visto hasta el momento, con dificultades para hacer los relevos, mantener la intensidad en la marca o elaborar jugadas de peligro
Los dos partidos que vienen serán los más difíciles de esta primera parte del campeonato; por tanto, servirán para conocer exactamente dónde estamos parados.
Espero sus comentarios, un abrazo para todos.

ACTUALIZACIÓN [04-03-13 / 12:47 p.m.]
Hoy el diario Gestión publica en su edición impresa algunos datos sobre la situación del club:
Los activos superan los S/.126 millones.
Los pasivos alcanzan los S/.243 millones (sin incluir la deuda con Gremco por el estadio que está en litigio).
Hasta diciembre del 2012 la planilla mensual del equipo profesional (incluyendo el comando técnico) alcanzaba los US$195 mil.
Las deudas corrientes correspondientes a la temporada pasada se han pagado en su totalidad.
Para este año, el sueldo máximo alcanza los US$12mil.

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http://gestion.pe/impresa/activos-universitario-superan-s-126-millones-2060464