El fin del mundo está cerca... otra vez
Seguramente viste la información. Seguramente dijiste: “claro, esto es un engaño”. Sin embargo, seguramente viste el video. Y seguramente lo compartiste con tus contactos de Facebook. Así es. El video que anuncia el fin del mundo para este 29 de julio se empezó a hacer viral a través de las redes sociales.
¿Qué es lo que me preocupa de esto? Varias cosas. La primera está relacionada con el poco interés que tenemos por la ciencia. Esto se ve evidenciado cuando solo nos llaman la atención las informaciones apocalípticas, cuando algo (tan misterioso como descabellado) le pone una supuesta fecha final a nuestros días. También demuestra nuestro poco sentido crítico relacionado con este tipo de temas. No nos importa que sea información basada en casi nula evidencia… igual la compartimos.
Y eso termina siendo lo más grave. El simple acto de compartir esta información solo ayuda a su difusión y que al llegar a personas más susceptibles a aceptar como válidas las afirmaciones del video, solo contribuiremos a la desinformación.
No, me equivoqué. Eso no es lo más grave. Lo peor es que los medios de comunicación, buscando solo jalar agua para su molino (refiriéndome a conseguir más tráfico para sus respectivas webs), hacen sus propias versiones de la nota. Todos, todos lo hicieron. Y no es nada de lo que hay que enorgullecerse. Mucho menos, podemos quejarnos porque nos llamen la atención o cuando alguien nos reclame por esa publicación.
Y, claro, en esas piezas se colocan frases como “el video que aterra a YouTube” o que “genera burlas entre los escépticos”, para tratar de salvar la situación. Pero no van más allá, no se atreven a desmontar una farsa usando argumentos sólidos. Solo se quedan en la anécdota, en el “quizás si pasa”, en la incertidumbre, en la sombra.
¿Eso es lo que realmente queremos? Yo no. No quiero que informaciones que no tienen el más mínimo asidero se conviertan en noticia. No quiero que la gente le preste atención a informaciones que no le servirán absolutamente para nada, ni siquiera para fines de ocio o entretenimiento.
Ah, y si buscas el video aquí, no lo voy a poner.