Dominio azulgrana en los primeros minutos del Barcelona vs. Athletic Club en la final de la Copa del Rey. El cuadro dirigido por el entrenador Ronald Koeman gozó de la jugada más clara del partido en solo cuatro minutos. Frenkie De Jong, que recibió de Lionel Messi, disparó al arco y la pelota impactó en el poste.
Desde el pitazo inicial, los catalanes controlaron las acciones con una posesión larga, mientras que los bilbaínos esperaron juntos y ordenados en su cancha. En ese contexto, el crack argentino recibió el esférico a pocos metros del área grande de la portería que defiende el guardameta Unai Simón.
Leo Messi avanzó, pero frenó frente a la marca de dos hombres del Athletic Club. Entonces, el delantero levantó la cabeza para hallar a Sergio Busquets, quien estuvo ubicado en el centro del terreno del adversario. En esos segundos, el ’10′ de los blaugranas ingresó dentro del área grande de los ‘Leones’.
Enseguida, el mediocampista de los culés lanzó por encima del muro formado por el Bilbao. La redonda cayó precisamente en el lugar al que picó el atacante, quien controló con la pierna, pero no estuvo en buena posición para sacar un disparo. Así que el capitán cedió para su compañero Frenkie De Jong.
El volante holandés le pegó a la pelota en primera y con el borde interno. La redonda se dirigió lentamente hacia el segundo poste de Simón, quien se estiró lo más que pudo. Cuando Barcelona se alistaba para celebrar el primero de la final, el balón chocó en el palo y se marchó fuera del terreno del estadio de La Cartuja en Sevilla.