Isabella Jugo Escate

En la primera entrega de Intensamente, en el 2015, conocimos a Riley como una niña alegre que, poco a poco, aprendió a aceptar sus nuevas emociones. Hoy, casi diez años después, el cual la recibió con nuevas emociones: ansiedad, envidia, aburrimiento, vergüenza y nostalgia. Estos nuevos personajes no solo existen en la vida de Riley, sino en la de cualquier niño o niña que se adentra en esta nueva etapa. Por lo tanto, si tu hijo o hija está experimentando estas nuevas emociones, conversamos con dos especialistas para compartirte todo lo que debes saber sobre ellas.

pasan por una etapa muy hormonal en la que sus emociones pueden variar de un momento a otro de forma extrema. Por ejemplo, pueden pasar de la tristeza a la alegría en cuestión de minutos, o de la confianza al temor. Es algo muy característico de ellos. Igualmente, conforme se va desarrollando, uno va ampliando su repertorio emocional para poder adaptarse a las circunstancias que la vida nos trae. A medida que vamos experimentando más, tendremos mayores emociones”, estableció Antonella Galli, psicóloga de la Clínica Ricardo Palma.

  • Ansiedad: Aparece cuando el adolescente se enfrenta a situaciones desconocidas fuera de la protección de sus padres y no está seguro de si lo hará bien o mal.
  • Envidia: En la adolescencia, uno suele observar cómo tratan a los demás y a veces quiere tener lo que otros tienen, como el físico o las capacidades.
  • Aburrimiento: Un adolescente suele ser muy impaciente, por lo que puede tender a aburrirse si no hay muchos estímulos.
  • Vergüenza: Viene a la par de la búsqueda de aprobación y pertenecer al grupo. El adolescente va a desarrollar mayor miedo a decir algo errado.
  • Nostalgia: Cuando el adolescente llega a experimentar las pérdidas y los cambios mientras la vida va avanzando, puede extrañar cómo eran las cosas antes. Esto se debe a que deja de sentirse niño
La ansiedad es una de las nuevas emociones que se presentan en Riley. (Foto: Oficial)
La ansiedad es una de las nuevas emociones que se presentan en Riley. (Foto: Oficial)

¿Cuáles son los cambios emocionales que se dan al llegar a la adolescencia?

En palabras de Kathryn Jones, psicóloga pediátrica de Cleveland Clinic, la adolescencia es un período de cambios emocionales sumamente significativos debido a una combinación de neurológicos y sociales: La experta indicó que los cambios principales incluyen:

  • Mayor sensibilidad emocional: Las fluctuaciones hormonales durante la pubertad, como el aumento de los niveles de estrógenos y testosterona, pueden intensificar las emociones. Los adolescentes pueden experimentar sentimientos de felicidad, tristeza, ira y frustración de manera más aguda que en etapas anteriores de su vida.
  • Desarrollo de la identidad: Durante la adolescencia, los jóvenes comienzanEste proceso de autodescubrimiento puede generar sentimientos de confusión e inseguridad, ya que los adolescentes intentan definir sus valores, creencias y objetivos personales.
  • Aumento de la independencia: Los adolescentes buscan mayor autonomía de sus padres y tutores, lo que puede generar conflictos y tensiones emocionales. Este deseo de independencia está ligado a la necesidad de tomar decisiones propias y establecer una identidad separada de la de sus padres.
  • Interacciones sociales complejas: Las relaciones con amigos y pares se vuelven extremadamente importantes durante la adolescencia. Estas relaciones pueden ser fuentes de apoyo emocional, pero también pueden causar estrés debido a las dinámicas sociales complejas, como la presión de grupo y la necesidad de aceptación.
  • Cambios cognitivos: El desarrollo del cerebro, particularmente la corteza prefrontal, que está involucrada en la toma de decisiones y el control de impulsos, contribuye a cambios en la forma en que los adolescentes procesan y regulan sus emociones.
Durante la adolescencia, los chicos se encuentran en la búsqueda de su propia identidad.
Durante la adolescencia, los chicos se encuentran en la búsqueda de su propia identidad.

La especialista hizo hincapié en que estos cambios se generan debido a múltiples factores, como la aparición de nuevas experiencias y responsabilidades, al igual que la búsqueda de identidad. “Los adolescentes enfrentan nuevas situaciones sociales y académicas que pueden ser estresantes y emocionalmente desafiantes. encajar con los amigos y tomar decisiones sobre el futuro contribuyen a la aparición de nuevas emociones”, aclaró Jones.

Del mismo modo, también influye el desarrollo cerebral del adolescente. “Durante la adolescencia, el cerebro sufre un desarrollo significativo, especialmente en áreas responsables de la regulación emocional y la toma de decisiones, como la corteza prefrontal y el sistema límbico. Este desarrollo puede resultar en una mayor susceptibilidad a las emociones fuertes y en una capacidad aún en formación para gestionar estas emociones de manera efectiva”, explicó la psicóloga de Cleveland Clinic.

Ansiedad, envidia, aburrimiento, vergüenza y nostalgia: ¿qué tan comunes son estas emociones en los adolescentes?

Conforme a la psicóloga pediatra de Cleveland Clinic, las nuevas emociones de Riley son bastante comunes en los adolescentes. En el caso de la ansiedad, esta se debe a la presión académica, las expectativas sociales y los cambios físicos propios de la edad. “La ansiedad puede manifestarse como preocupación constante, nerviosismo y dificultades para concentrarse”, desarrolló.

De la misma forma, explicó que la envidia surge a medida que los adolescentes comparan sus habilidades, apariencia y posesiones con sus pares. Sobre todo, esta emoción puede ser especialmente prevalente pues los chicos están cada vez más expuestos a expectativas físicas irreales.

Por otro lado, Jones hizo énfasis en que el aburrimiento es frecuente debido a que los adolescentes buscan constantemente nuevas experiencias y desafíos, por lo que la monotonía y la falta de estímulos los pueden llevar y desmotivación.

En tanto a la vergüenza, la experta afirmó que esta emoción suele intensificarse durante la adolescencia porque los chicos empiezan a tener mayor conciencia de sí mismos, lo cual se junta con el temor al juicio de los demás. “Los adolescentes pueden sentirse avergonzados por su apariencia, comportamientos o errores”, agregó la especialista.

La vergüenza se debe a que los adolescentes tienen medio a lo que los demás puedan pensar de ellos.
La vergüenza se debe a que los adolescentes tienen medio a lo que los demás puedan pensar de ellos.

Finalmente, puede aparecer como una reflexión sobre la infancia y los cambios que están experimentando. Es completamente normal que los adolescentes anhelen la simplicidad y la seguridad que sentían en años anteriores mientras enfrentan las incertidumbres del crecimiento y las nuevas experiencias que este trae.

¿Cómo identificar estas nuevas emociones en mi hijo adolescente?

De manera más específica, Kathryn Jones reunió las cinco nuevas emociones de Riley cómo se puede identificar cada una, tanto a nivel físico como emocional:

Ansiedad

  • Síntomas físicos: Dolores de cabeza, de estómago, sudoración excesiva, palpitaciones y tensión muscular.
  • Síntomas emocionales: Preocupación constante, irritabilidad, dificultades para concentrarse, o académicas.

Envidia

  • Comparaciones constantes: Los adolescentes pueden comparar constantemente sus habilidades, apariencia y pertenencias con las de sus amigos y compañeros.
  • Sentimientos de resentimiento: Pueden sentir resentimiento o insatisfacción con lo que tienen, y desear lo que otros poseen.

Aburrimiento

  • Quejas frecuentes: Los adolescentes pueden quejarse con frecuencia de no tener nada que hacer y mostrar desinterés en actividades que antes disfrutaban.
  • Inactividad: Pueden pasar mucho tiempo sin hacer nada productivo o interesante.

Vergüenza

  • Evitación social: Los adolescentes pueden debido al temor al juicio o la crítica. Pueden sentirse avergonzados por su apariencia, comportamientos o errores, y preocuparse excesivamente por la percepción de los demás.
  • Preocupación excesiva: Pueden mostrar una y una preocupación constante por lo que otros piensan de ellos, lo que puede llevarlos a aislarse o a ser extremadamente reservados en situaciones sociales.

Nostalgia

  • Reflexiones sobre el pasado: Los adolescentes pueden reflexionar frecuentemente sobre su infancia, mostrando un deseo por los tiempos pasados cuando la vida parecía más sencilla y segura.
  • Sentimientos de melancolía: Pueden experimentar tristeza al recordar momentos felices del pasado y compararlos con las dificultades presentes.

¿Aprender a combatirlas o manejarlas?

Antonella Galli destacó la importancia de tener en claro que Son expresiones de nuestras vivencias que nos llevan a conectarnos con nosotros mismos, tener un mejor desarrollo y conocernos mejor. Por lo tanto, no debemos buscar ‘combatirlas’ como tal, y aprovechar su lado positivo. “Es decir, debemos apoyar a nuestros hijos para que logren utilizar estas nuevas emociones para desarrollar mayores estrategias para combatir la vida”, aseveró la psicóloga.

Como padres, es fundamental enseñarles a recibir estas nuevas emociones y aprovechar lo positivo de ellas.
Como padres, es fundamental enseñarles a recibir estas nuevas emociones y aprovechar lo positivo de ellas.

“Por ejemplo, la envidia me lleva a reconocer que necesito trabajar en mí mismo y en mi autoestima para sentirme feliz y orgulloso con la persona que soy. Igualmente, me lleva a desarrollar estrategias para conocer más del tema que me está preocupando y acostumbrarme a salir de mi zona de confort”, declaró la especialista de la Clínica Ricardo Palma.

Asimismo, comentó que el aburrimiento es importante para aprender a estar tranquilo y calmado, pues no siempre es necesario estar sobreestimulado. Por el otro lado, la vergüenza es útil para saber cuando una persona realmente nos importa, pero también tener en cuenta que no siempre se puede contentar a todos.

“La nostalgia, por otro lado, nos sirve para valorar los recuerdos positivos y reconectar con nuestro niño interior. Del mismo modo, nos permite valorar lo que tenemos, pues no sabemos si seguirá ahí en un futuro”, señaló Galli.

¿Cómo apoyar a mi hijo para que logre manejar estas nuevas emociones?

En cuando a la ansiedad, Kathryn Jones sostuvo que fomentar conversaciones abiertas con los adolescentes sobre sus preocupaciones es imprescindible para ayudarlos a manejarla. “Mediante la comunicación abierta, debemos permitirles expresar sus miedos y ansiedades. como ejercicios de respiración y meditación, también son de mucho apoyo para que logren controlar recomendó.

En esa línea, Antonella Galli agregó que añadir deportes a la rutina de los adolescentes también es bastante útil para que los chicos dejen ir los pensamientos negativos anticipatorios y tener más confianza en sí mismos.

“La envidia, en la otra mano, del adolescente, por lo que es vital hacerle saber lo valioso que es y ayudarlo a identificar sus habilidades, capacidades y características positivas. Esto lo ayudará a no compararse con sus compañeros o cualquier chico de su edad”, aconsejó Galli. Para ello, Jones subrayó que fomentar la gratitud es muy relevante, pues así los jóvenes aprenderán a enfocarse en las cosas positivas del día a día y a apreciar lo que tienen.

Fortalecer su autoestima es vital para evitar la envidia.
Fortalecer su autoestima es vital para evitar la envidia.

Como compartió Galli previamente, el aburrimiento no siempre es malo. De todas formas, no está de más animar a los adolescentes a generar nuevas aficiones e intereses para aprovechar su tiempo. Para lograrlo, Kathryn Jones sugirió ayudarlos a estructurar su tiempo libre, fomentar su creatividad y explorar nuevas actividades que puedan despertar su interés.

La nostalgia es una emoción que puede ser sumamente aprovechada, pues es una forma de tener presentes las experiencias positivas del pasado. A pesar de ello, la especialista de la Clínica Ricardo Palma remarcó que una persona que vive en el ayer y no mira hacia adelante puede ser proclive a caer en una tristeza constante al recordar lo que solía tener, Para que eso no suceda, Jones propuso algunas estrategias, como la creación de nuevas memorias. “Como padres, pueden fomentar actividades que construyan nuevas experiencias positivas y memorables, así como planificar eventos familiares, viajes o actividades que puedan disfrutar y recordar con cariño”, aleccionó.

Finalmente, la vergüenza es una de las emociones más presentes en los adolescentes debido al nuevo entorno social en el que se encuentran. Para sobrellevarla, Jones brindó los siguientes consejos:

  • Normalizar los sentimientos: Explicarles que la vergüenza es una emoción común que todos experimentan en algún momento. Compartir experiencias personales puede ayudar a que se sientan comprendidos y menos solos.
  • Crear un entorno seguro: Fomentar un ambiente en el hogar donde se sientan aceptados y no juzgados. y el apoyo emocional puede ayudar a que se sientan más seguros.
  • Enseñar habilidades sociales: Practicar situaciones sociales con ellos puede ayudarles a ganar confianza. Role-playing y otros ejercicios pueden prepararles para enfrentar situaciones que les causan vergüenza.
  • Fomentar la autoaceptación: Ayudarles a enfocarse en sus fortalezas y logros en lugar de sus fallos. Fomentar una autoimagen positiva puede reducir los sentimientos de vergüenza.

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