El pasado 17 enero pasado, Fernando Calderón Olivera (29) recibió un disparo en la cabeza cuando se encontraba trabajando como repartidor en el distrito de Comas y fue asaltado en plena vía pública.
Su esposa, Lady Vega comentó que los médicos no le dieron esperanza que sobreviviera. "Me dijeron que espere lo peor pero cautivé mi fe y pensar que eso no sucedería", señaló a "América Noticias"
Tras dos semanas de permanecer en coma, Fernando despertó. Los galenos presagiaron que quedaría postrado en una cama - pero ocho meses después - se encuentra reestablecido y compartiendo con su familia.
El agraviado poco a poco ha ido recuperando la movilidad de la pierna y el brazo derecho, pero sigue sin recordar el momento en que fue asaltado.
Calderón ha vuelto a hacer su vida en forma normal pero aún no se anima a subir a un escenario y cantar reggaeton, actividad por la cual siente una gran pasión. "Me he dedicado a la música por más de diez años, toda la vida y yo lo quiero hacer", señaló agradecido con la vida por esta nueva oportunidad.