Mirko Baza falleció debido a la herida de una bala que recibió cuando atacaba a los policías en el Rímac (USI)
Mirko Baza falleció debido a la herida de una bala que recibió cuando atacaba a los policías en el Rímac (USI)
Redacción EC

Mirko Alejandro Baza Loza (23) decía ser futbolista y era amante de las motocicletas pero su expediente policial acumulaba varias denuncias. Para la Policía, este sujeto es el autor del crimen de los suboficiales José Luis Pacheco Paredes y Javier Alfonso Chaupis Lezameta, la tarde del martes en el Rímac.

Las evidencias encontradas en la casa en donde fue detenido lo delataron. Se le halló una pistola de fuego, calibre 38, con la que presuntamente asesinó a los policías. El arma era ilegal porque no tenía número de serie, informó América Noticias.

“Tenemos un arma completamente rastrillada como si hubiese quedado sin municiones”, menciona un agente durante la intervención.

Aquel día, Baza Loza fue intervenido al interior de una vivienda ubicada en la cuadra tres del jirón Becerra en la zona de Ciudad del Campo en el Rímac. Al ser trasladado al hospital falleció cuando los médicos retiraban los proyectiles de bala que tenía en el cuerpo.

Sin embargo, de acuerdo al informe de América Noticias, Baza Loza, alias ‘Negro Mirko’, registraba varias denuncias:

Fue denunciado por realizar doce disparos contra un inmueble en el Callao. El motivo de su actitud fue porque prestó una suma de dinero y no le quisieron pagar. El parte policial detalla que Baza Loza se encontraba a bordo de una moto lineal de color negro sin placa de rodaje.

En agosto de este año, su ex pareja lo denunció por hacer varios disparos contra su vivienda. La Policía encontró varios casquillos en el piso. Las paredes y ventanas tenían agujeros en diferentes partes del inmueble.

Mientras, en enero protagonizó otra fuga a bordo de una moto que ocurrió en Magdalena. Baza terminó empotrando su motocicleta contra un auto, luego siguió a pie hasta que agentes lo capturaron. Pese a ser detenido trató de arrebatar el arma a uno de los agentes.

También registra denuncias por distribuir droga, por el delito de robo agravado y ocasionar lesiones seguidas de muerte.

Cabe recordar, que hace tres años estuvo recluido en el penal Miguel Castro Castro luego de ser blanco de un ataque en 2014 a su salida de una discoteca de San Martín de Porres. Recibió varios disparos en el abdomen, tórax y pierna izquierda.

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