Un empresario de Houston, Texas, se llevó una gran sorpresa cuando descubrió que su casa en Malibú había sobrevivido a los devastadores incendios forestales que arrasaron con varias áreas de Los Ángeles. Mientras veía las noticias sobre el incendio, David Steiner temía lo peor para su propiedad, valorizada en 6,9 millones de dólares.
“Ciertamente fue emocionalmente agotador cuando pensé que había desaparecido”, confesó el empresario en conversación con ABC7; sin embargo, para su asombro, su casa permanecía en pie entre los escombros de las casas vecinas.
“No utilizo la palabra milagro. Digo que es una gran arquitectura, unos bomberos valientes y quizá una pizca de milagro”, agregó.

Steiner adquirió la propiedad en 2015 para tener un lugar donde quedarse cuando visitaba a sus hijos que estudiaban en universidades cercanas. A pesar de ser una vivienda de lujo, el hombre siempre consideró a Houston su hogar principal.
Por otra parte, el empresario expresó su empatía hacia sus vecinos que perdieron sus casas. “Ver sus casas destruidas, les digo a todos que yo perdí una propiedad, ellos perdieron sus casas, perdieron sus recuerdos”, afirmó con tristeza.
Steiner cree que la construcción de hormigón (concreto) de su casa jugó un papel crucial en su supervivencia. Según él, la propiedad podría haber sido concebida originalmente para resistir terremotos.

Aunque su casa se salvó, Steiner aún tiene pendientes varias tareas. Debido a una cláusula en su póliza de seguros, solo está cubierto al 50% de los daños causados por incendios forestales. Además, planea visitar Malibú la próxima semana para evaluar si hay daños por humo o agua.
A pesar de las pérdidas y la incertidumbre, el empresario se muestra optimista y considera la posibilidad de ayudar a las víctimas del incendio.
Se confirma la muerte de 24 personas por los incendios de Los Ángeles, California
Los incendios forestales en Los Ángeles han causado una devastación sin precedentes. Hasta el momento, al menos 24 personas perdieron la vida y decenas más están desaparecidas. Los incendios de Palisades y Eaton, los más grandes de la región, arrasaron miles de hectáreas, destruyendo hogares y obligando a miles de personas a evacuar sus viviendas.
Los fuertes vientos de Santa Ana han dificultado enormemente las labores de extinción. A pesar de los esfuerzos de los bomberos, los incendios aún no están completamente controlados y se espera que la situación empeore debido a las condiciones climáticas adversas. Las autoridades han impuesto un toque de queda para evitar saqueos y garantizar la seguridad de los residentes.
El número de víctimas y la magnitud de los daños continúan aumentando a medida que los bomberos trabajan incansablemente para contener las llamas. La comunidad se encuentra en estado de emergencia y se espera que la recuperación sea un proceso largo y complejo.