
Un adolescente de 13 años decidió entregarse voluntariamente a las autoridades migratorias en Houston para ser deportado junto a su madre, detenida por ICE. Su decisión, aunque poco común, pone rostro a los dilemas migratorios que muchas familias enfrentan en Estados Unidos.
El menor llegó al centro de detención acompañado de su abogada y, antes de cruzar la puerta, se despidió de su padrastro. Tras varios intentos y trámites, logró que le permitieran ingresar al centro donde se encuentra su madre, Yusmari Galindez, de 27 años.

La familia había ingresado legalmente al país mediante la aplicación CBP One, pero su proceso migratorio fue anulado, al igual que el parole humanitario que les había sido otorgado.
Todo cambió cuando Yusmari fue detenida tras una infracción de tránsito. A partir de ese momento, el temor de una deportación separada se convirtió en una amenaza real.
“Tengo miedo que me saquen sin mi hijo. Porque ya yo firmé y ellos me pueden sacar en cualquier momento sin mi hijo”, declaró la madre a Noticias Telemundo desde el centro de detención.

Fue ese miedo el que impulsó al adolescente a tomar una decisión que muy pocos en su lugar tomarían. “Pues sí me siento muy feliz porque ya me voy a mi país con mi familia y mi mamá”, declaró el joven.
Por su parte, ICE indicó al citado medio que, por razones de privacidad, no puede confirmar si madre e hijo fueron finalmente reunidos ni si fueron deportados juntos a Venezuela.

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