Se sabe que un gato hidráulico es una herramienta imprescindible al momento de cambiar un neumático. Sin embargo, si lo colocamos en el lugar incorrecto, podemos ocasionar daños irreparables en el marco del vehículo y hasta causar algún tipo de accidente. Por tal motivo, aquí en Mag te decimos la manera correcta de hacerlo.
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¿Dónde se coloca la gata?
Lo primero que debes ubicar son los dos puntos de apoyo que, normalmente, se encuentran bajo el coche. ¿Lo identificaste? Si aún no lo conseguiste, son dos barras planas metálicas las cuales se extienden por ambos costados de tu automóvil, situándose en paralelo con los paneles laterales.
En algunos casos, puede haber otros dos puntos de apoyo más, los cuales se encontrarán situados justo detrás de los parachoques delantero y trasero. Un dato a tomar en cuenta es que, de largo, ocupan el espacio que hay entre las ruedas delanteras y las traseras. Una vez que hayas ubicado estos puntos, coloca el gato hidráulico, así lo precisa el portal Mapfre.
Cómo utilizar el gato hidráulico
- El primer paso será aflojar las tuercas del neumático, pero aún no las quites.
- Espera que el auto esté despegado del suelo. ¿Listo? Seguimos.
- Realiza un movimiento de palanca de arriba hacia abajo a fin de levantarlo.
- Posteriormente, verifica que el neumático a cambiar esté despegado del suelo.
- Asegúrate de que el gato hidráulico permanezca en posición recta.
- El siguiente paso será retirar el neumático con mucho cuidado.
- Posteriormente, coloca la llanta de repuesto. Eso sí, asegúrate que los tornillos entren en el lugar adecuado.
- Aprieta cada uno de los tornillos para evitar cualquier tipo de accidente.
- Baja el gato hidráulico girando hacia los lados la palanca lentamente.
- Finalmente, retira el gato hidráulico y eso será todo.
Datos recopilados del portal Sus Refacciones.
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