Aunque es bien sabido que la proteína es fundamental para mantener la masa muscular y la salud en general, consumirla en exceso, especialmente en ciertas etapas de la vida, podría tener consecuencias negativas para tu longevidad.
El doctor Joseph Antoun, CEO de la compañía de longevidad L-Nutra, explicó que no todas las proteínas actúan igual en el cuerpo. “Las proteínas animales son ricas en arginina, leucina y contienen secuencias específicas de aminoácidos que estimulan la secreción de IGF-1, mientras que una cantidad equivalente de proteínas vegetales es menos probable que genere la misma cantidad de IGF-1”, dijo en conversación con el New York Post.
El IGF-1 es una hormona que se produce principalmente en el hígado. Ayuda al crecimiento y regula el metabolismo. Es clave para formar músculo, tanto en la juventud como en la vejez, ya que después de los 60 años la pérdida muscular se acelera. Como los niveles de IGF-1 bajan con la edad, es importante mantenerlos en un rango saludable.
Según el médico Joseph Antoun, el consumo en exceso de carne podría tener consecuencias negativas para tu longevidad. (Foto referencial: Freepik)
Según Antoun, “antes de los 30 años, se considera saludable consumir ciertas cantidades de carne dentro de una dieta basada en plantas”. Lo mismo ocurre después de los 65, cuando el cuerpo comienza a absorber menos nutrientes y el músculo se vuelve esencial para vivir más tiempo. Pero entre esos dos puntos, la historia cambia.
“Entre los 30 y los 65 años se recomienda consumir principalmente proteínas de origen vegetal”, dijo. “El periodo de la mediana edad es cuando se forman muchas enfermedades y cuando la velocidad y calidad del envejecimiento determina, en gran parte, nuestra esperanza de vida”.
Para quienes quieren vivir hasta los 100 años, Antoun sugiere seguir la llamada “Dieta de la Longevidad”, centrada en proteínas vegetales como frijoles, legumbres, nueces y semillas. “Esta dieta enfatiza el consumo de proteínas vegetales para mantener masa muscular magra y reducir la inflamación, lo cual es importante para la salud cardiovascular y metabólica”, explicó. También mencionó que otras dietas como la pescetariana, la mediterránea o la flexitariana están asociadas con un envejecimiento saludable. En el caso de las dietas veganas, advirtió que deben complementarse con proteínas en las primeras y últimas etapas de la vida.
Para vivir más, el experto sugiere seguir una dieta centrada en proteínas vegetales como frijoles, legumbres, nueces y semillas. (Foto referencial: Freepik)
Antoun también advirtió sobre los efectos a largo plazo de las dietas basadas en carne. “Las dietas animales estimulan el IGF-1 y ayudan a lucir bien y musculoso en el corto plazo, lo cual muchas empresas de alimentos venden como señal de salud y fuerza. Pero, en realidad, el cuerpo entra en ‘modo de envejecimiento acelerado’, lo que lleva a una vida más corta”, dijo. “Los fisicoculturistas, por ejemplo, lucen increíbles en su juventud, pero terminan viéndose mucho mayores de lo que son en sus 50 y 60 años”.
Por último, Antoun señaló que no todas las proteínas animales son iguales. “La carne roja, el pollo y el pescado contienen diferentes porcentajes de leucina y arginina”, agregó. “La carne roja también es alta en grasas saturadas, mientras que el pescado contiene grasas más saludables, insaturadas”.
Por lo tanto, si quieres disfrutar de una buena hamburguesa cuando te jubiles, lo mejor que puedes hacer ahora es comer más garbanzos. En palabras de Antoun: “Come para vivir, no vivas para comer”.
Una dieta basada en carne puede hacer que una persona luzca mucho mayor a sus 50 o 60 años. (Foto referencial: Freepik)
Claves para envejecer saludablemente
Según MedlinePlus, envejecer saludablemente implica adoptar un estilo de vida que promueva el bienestar físico y mental a medida que pasan los años. Esto incluye mantener una alimentación nutritiva, rica en frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras, y limitar las grasas no saludables, el azúcar y el sodio.
La actividad física regular es otro pilar fundamental para un envejecimiento saludable. Realizar ejercicio de forma constante, adaptado a las capacidades de cada persona, contribuye a mantener la fuerza muscular, el equilibrio, la salud cardiovascular y el estado de ánimo.
Además de la salud física, MedlinePlus destaca la importancia de cuidar la salud mental y mantenerse conectado socialmente. Esto puede incluir actividades que estimulen la mente, como leer o aprender nuevas habilidades, y mantener relaciones con familiares y amigos. Controlar el estrés y dormir lo suficiente también son aspectos cruciales para un envejecimiento saludable.
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