Si eres de los que cree en las cábalas de Año Nuevo, seguramente ya has oído hablar de la canela como un ingrediente especial para atraer buena suerte, prosperidad y energía positiva. Y si no lo sabías, te cuento que soplar canela en tu puerta es uno de esos rituales sencillos pero poderosos que puedes hacer para darle la bienvenida a un año lleno de bendiciones. En ese sentido, May Shorrock, experta en rituales y bienestar espiritual, explica por qué este gesto tiene tanto poder y cómo puede marcar la diferencia en cómo arranca tu año.
¿Qué efecto produce soplar canela en la puerta de tu casa el 1 de enero?
“La razón por la que soplamos canela en la puerta principal de la casa el 1 de enero es que esto marca el comienzo de un nuevo ciclo, por lo que es la oportunidad perfecta para nuevos comienzos positivos”, dice Shorrock a Homes & Gardens.
La experta comenta que mucha gente elige soplar canela en la puerta de su casa para “atraer abundancia y prosperidad a todo el hogar, y este ritual ha perdurado a lo largo del tiempo. La canela se ha usado durante miles de años en rituales para atraer riqueza, así que tiene un respaldo histórico bastante sólido”, afirma.
Charlotte Bailey, experta esotérica, añade que esta práctica metafísica actúa como una especie de puerta entre nuestro mundo interior y exterior.
“Al soplar la canela a través de la puerta, estamos invitando a la prosperidad y la abundancia a cruzar desde el mundo exterior hacia nuestro hogar, es decir, hacia nuestro mundo interno”, comenta.
“Las plantas y hierbas como la canela no solo tienen propiedades y beneficios físicos, sino que también tienen propiedades espirituales que nos ayudan. Se cree que la canela trae buena suerte y prosperidad a la persona que la usa”, agrega Sarah Proffitt, consejera espiritual.
Así que, aunque muchos disfrutan de los beneficios de la canela en la cocina y el jardín (como usarla en la tierra para ahuyentar a los mosquitos, o para eliminar hormigas en la cocina), para otros tiene un significado mucho más profundo y tradicional.