
La ciudad de Nueva York anunció una inversión de $16 millones de dólares destinada a más de 1,800 escuelas públicas como parte de una iniciativa para prohibir el uso de celulares en las aulas. Esta medida impactará a más de un millón de estudiantes, incluidos decenas de miles de origen dominicano, especialmente en distritos escolares como el número 6, que abarca vecindarios como Washington Heights, Inwood y Hamilton Heights.
Según el Departamento de Educación de NYC (DOE), cada escuela tendrá acceso a una financiación única de $25.90 por estudiante en los grados 3.º a 12.º. El objetivo es implementar soluciones de almacenamiento seguras para celulares y reducir distracciones durante el horario escolar, promoviendo un entorno más enfocado en el aprendizaje.
¿Qué escuelas recibirán más presupuesto?
La cantidad de fondos dependerá del número de estudiantes matriculados. Escuelas con grandes poblaciones estudiantiles recibirán montos significativos:
- Brooklyn Tech, la escuela secundaria más grande del país, recibirá más de $145,000.
- Francis Lewis High School en Queens, más de $122,000.
- James Madison High School en Brooklyn, más de $110,000.
El propósito de esta asignación es cubrir costos relacionados con armarios de almacenamiento, estaciones seguras para dispositivos y otras soluciones que garanticen que los celulares estén fuera del alcance de los estudiantes durante las clases.

¿Por qué Nueva York prohíbe los celulares en clase?
La medida responde a preocupaciones crecientes sobre cómo los teléfonos móviles afectan la atención, participación y rendimiento académico de los estudiantes. Si bien algunas escuelas ya aplicaban restricciones, esta iniciativa busca estandarizar la política en todo el sistema educativo más grande del país, brindando recursos logísticos a cada centro para hacerla efectiva.
El DOE ha enfatizado que la intención no es eliminar completamente los celulares, sino limitar su uso a momentos adecuados, fuera del horario de clases, y así fomentar un ambiente educativo libre de distracciones.











