Conductor de accidente mortal en Australia queda en libertad antes del juicio

Un conductor de un autobús, acusado de conducción negligente que causó un accidente con diez víctimas mortales al norte de Sídney, compareció el martes ante un tribunal australiano que decidió dejarlo en libertad hasta el juicio.

Según la policía, Brett Andrew Button, de 58 años, conducía “demasiado rápido” en condiciones de niebla y baja visibilidad el domingo justo antes de medianoche, cuando se produjo el accidente de carretera más mortífero de Australia en 16 años.

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La juez Robyn Richardson dejó al cabizbajo conductor en libertad condicional a la espera del juicio, y expresó su preocupación por “el bienestar” del acusado, al que describió como “un hombre sufriendo”.

El vehículo que conducía con 35 pasajeros perdió el control en una rotonda y volcó de costado, matando a nueve personas casi de inmediato.

Otro pasajero murió después en un hospital y catorce están todavía ingresados, uno de ellos en cuidados intensivos.

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El conductor dio negativo en un test de alcoholemia pero manejaba con una velocidad errática y excesiva de la que algunos pasajeros se habrían quejado antes del accidente, según la policía.

Todos los pasajeros venían del festejo de una boda en la pintoresca región australiana de Hunter Valley.