Los chilenos elegirán este domingo entre dos rumbos totalmente opuestos para su país. El izquierdista Gabriel Boric y el ultraconservador José Antonio Kast ya jugaron sus últimas cartas. Intentos de moderación y esfuerzos por maximizar las debilidades del rival fueron la constante en el último tramo de la campaña. La pregunta es ahora quién logrará movilizar a más indecisos y votantes de centro, los llamados a definir una de las elecciones más polarizadas, inciertas y trascendentales desde el retorno a la democracia en el vecino del sur hace más de 30 años.
Aunque Kast ganó la primera vuelta, las encuestas publicadas antes de que se prohibiera su difusión –desde el sábado 4– daban como favorito al candidato izquierdista por entre 4 y 8 puntos. Pese a ello, analistas y algunos sondeos privados apuntan que la distancia entre ambos se ha acortado en los últimos días y que el resultado será bastante estrecho, al punto que algunos estudios registran un empate técnico.
MIRA: Boric vs. Kast: ¿quién ganó el último debate y cómo triunfar en la batalla por los indecisos en Chile?
En un país donde el voto no es obligatorio y el abstencionismo es cercano al 50%, la participación electoral será crucial. “Lo importante ahora para ambos candidatos es lograr que sus simpatizantes vayan a votar. Todo va a depender de cuánta gente salga a votar y de quiénes lo hagan. Si sale más gente joven, probablemente va a ganar Boric; si sale más bien gente mayor, quizá gane Kast. Pero no creo que a última hora se convenza a mucha gente”, dice a El Comercio el politólogo chileno Patricio Navia.
Paula Molina, periodista chilena del canal de televisión La Red y de Radio Cooperativa, apunta que este es un proceso electoral demandante para Chile y que será interesante ver cómo se van a movilizar los votantes chilenos, sobre todo los de centro.
“Se trata de una elección con programas y candidaturas muy distintas, que apuntan a proyectos y miradas de la sociedad bastante disímiles. En este escenario lo que uno podría esperar es que los ciudadanos nos sintamos convocados a ir a votar y a no quedarnos al margen de una decisión de enorme importancia”, destaca a este Diario.
Estas son algunas de las diferencias más sustanciales entre los proyectos de país de Boric y Kast.
1. Economía: la batalla por hacer un cambio profundo en el modelo
Boric es el abanderado de la parte de la sociedad chilena que quiere cambios profundos en el vecino del sur, y el más drástico de ellos es en materia económica.
“Desde la perspectiva económica, los dos proyectos son bastante opuestos. El proyecto de Boric quiere crear un Estado más grande, con más protección social y más impuestos, que se preocupe más de la distribución que del crecimiento, mientras que el programa de Kast quiere preocuparse más del crecimiento que de la distribución, para lo cual quiere bajar los impuestos y reducir el tamaño del Estado”, señala Navia.
En ese sentido, el experto afirma que, claramente, el proyecto de Boric representa un mayor cambio para Chile, pues Kast quiere mantener el modelo neoliberal heredado de la dictadura y profundizarlo, mientras que Boric quiere cambiar de forma bastante drástica el modelo económico, lo que hace que un sector de la población tema que el crecimiento se vea afectado negativamente.
2. Constituyente: el apoyo presidencial a la nueva Carta Magna
La Convención Constituyente que empezó en julio como vía política para responder al estallido social del 2019 y que en este momento escribe una nueva Carta Magna es mayoritariamente de izquierda y tiene el respaldo de Boric. Kast, en cambio, ha expresado profundas dudas sobre el proceso y llegó incluso a votar en contra.
“Kast es el candidato emblema del rechazo a la Constituyente y si es presidente, probablemente esto lleve a un conflicto con la Convención y eventualmente con el plebiscito de salida en el que la ciudadanía decidirá si ratifica o no el documento”, señala Julieta Suárez-Cao, profesora asociada del Instituto de Ciencia Política de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Paula Molina destaca que el proceso Constituyente es un factor trascendental en esta elección pues las dos candidaturas tienen miradas muy distintas respecto a eso. “Eso es bien relevante porque el proceso constituyente chileno no es una cuestión accesoria en nuestras conversaciones y probablemente no lo sea en nuestro devenir histórico. Es un momento clave en el que Chile está apostando por una solución institucional para una situación de crisis muy profunda. Por eso lo que está en juego es muy importante en el país”.
3. Seguridad: entre la mano dura y una reforma policial
Quien ha tenido un discurso más fuerte sobre seguridad ha sido Kast. El candidato de derecha defiende un plan de orden y paz y ha hablado incluso de permitir detener a personas en lugares distintos a las cárceles durante un estado de excepción y con desórdenes extremos.
Navia resalta que Kast tiene un discurso mucho más en defensa de la ley y el orden, de fortalecer a la policía, mientras que Boric apuesta por el diálogo con las comunidades y por reformar a la policía para asegurarse de que privilegie la protección de los derechos humanos por sobre la preocupación por la ley y el orden, aunque destaca que en la segunda vuelta los dos han tomado posiciones un poco más moderadas.
4. Migración: la propuesta de una zanja en la frontera
Pese a que moderó varias de sus posturas iniciales, Kast mantiene su propuesta de construir una zanja en la frontera norte para evitar el paso de migrantes irregulares y de endurecer los controles fronterizos con drones y contingente militar.
Del otro lado, Boric afirma que existen otros mecanismos para enfrentar el problema. Ha prometido una política migratoria “regular, ordenada y segura”.
“A los migrantes hay que tratarlos desde la perspectiva de los derechos humanos”, afirmó durante la campaña.
“Tenemos a un candidato que plantea que la solución a los problemas de seguridad, de migración y del conflicto con el pueblo mapuche está de la mano de la militarización y a otro que cree que hay que generar otro tipo de soluciones asentadas en mayor cooperación internacional y en el diálogo”, apunta Suárez-Cao.
En Chile hay casi 1,7 millones de inmigrantes y según la Organización Internacional de Migrantes de la ONU es el segundo país con mayor porcentaje de inmigrantes de la región. En lo que va del año más de 25.000 personas han llegado al país del sur por el desierto de Atacama, según cifras oficiales. Un incremento significativo respecto de las 16.500 de todo el 2020.
5. Medio ambiente: prioridad o cambio de discurso
En cuanto al medio ambiente, Boric ha mantenido sus propuestas para enfrentar la crisis climática, entre las que considera el manejo del agua y la escasez hídrica.
“Debemos cumplir nuestros compromisos climáticos internacionales y ser más ambiciosos en su formulación, fortaleciendo nuestras metas de mitigación de mediano y largo plazo para adelantar la meta de ser un país carbono neutral”, dice el programa del izquierdista.
Kast cambió su discurso sobre el tema en la recta final de la campaña y ahora su plan reconoce a la acción humana como responsable de este problema y plantea medidas al respecto. También ha asegurado que dará “una batalla épica contra la desertificación y el cambio climático”.
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