:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/LJVCMNFHNNEP5GIXVCC7MU7QNU.jpg)
Una pareja de esposos, su hijo de 2 años y el conductor del mototaxi en el que viajaban perdieron la vida al ser sepultados por varias toneladas de aserrín que transportaba un camión que volcó.
La policía informó que el accidente ocurrió el último viernes a las 4 p.m. en el distrito de Pichanaki, provincia de Chanchamayo (Junín). En una curva de la Carretera Central La Merced–Satipo, a la altura del kilómetro 63, volcó el camión que conducía Oswaldo Solís Huerta, de 59 años.
Toda la carga de aserrín que llevaba el camión cayó encima del mototaxi, cuyos ocupantes murieron por asfixia. La mototaxi se dirigía de Pichanaki a la comunidad de Bajo Aldea.
De forma increíble, nadie se percató de que habían quedado sepultados en plena carretera. Recién el sábado al mediodía, cuando pobladores de Ciudad Satélite quitaban el aserrín para reabrir la vía, hallaron los cadáveres.
Primero apareció un brazo del conductor del mototaxi, Miguel Ángel Hualpa Gómez (33), y después los cuerpos de Rosario Pinto Paucar (36); su esposo, Wilber Barboza Quispe (38), y el hijo de ambos, Jesús (2).
Tras el accidente, el conductor del tráiler se dirigió al hospital de Pichanaki para ser atendido por los golpes y las heridas que sufrió. Posteriormente, declaró ante la policía que no se dio cuenta del mototaxi y que el vuelco se produjo por una falla mecánica y no por exceso de velocidad.
Tras el hallazgo de los cadáveres, la policía de la comisaría de Pichanaki detuvo al conductor del camión. En el atestado que envió a la fiscalía, lo responsabilizan de negligencia y abandono de personas en peligro.
