Alberto Fujimori: ¿es posible indultar nuevamente al condenado expresidente?

Un eventual indulto humanitario al expresidente Alberto Fujimori ha vuelto al debate público después de que el ministro de Justicia, Aníbal Torres, declaró que el gobierno no descarta otorgar dicho beneficio al exmandatario, quien cumple una condena de 25 años de prisión por delitos contra los derechos humanos cometidos durante su régimen en los 90.

El ministro afirmó que es posible que se evalúe otorgar el indulto, si una junta médica acredita que la salud de Fujimori es grave. “Si su situación de salud ha empeorado considerablemente, si su enfermedad es de tal gravedad, es posible hablar de un indulto humanitario. No excluimos esa posibilidad”, dijo.

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“Los delitos que cometió son muy graves. En Ayacucho se les quemaba vivos a las personas. Las autoridades son las que dan la orden y son responsables de los resultados. En La Cantuta los torturaban y los queman. La gente está indignada y dolida, y con mucha razón. Pero nosotros atendemos lo razonable, si esta persona está gravemente enferma, lo lógico es que vaya a morir a su casa, eso será después de que se haga el examen por una junta de médicos”, sostuvo.

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Desde la agrupación política que dirige Keiko Fujimori, la congresista Patricia Juárez criticó las declaraciones del ministro, por “jugar con las expectativas”.

“Señalar o mencionar siquiera un indulto al presidente Fujimori, lo que hace, es jugar con las expectativas que se podrían generar y además con la salud del expresidente de la República que hace muy poco ha sido sometido a una operación al corazón”, señaló.

Juárez agregó que “él no puede estar dando de manera muy suelta este tipo de comentarios o entrevistas que finalmente lo que ocasionan es estar luego discutiendo algo que él perfectamente sabe que no ha sido pedido por la familia”.

Esta cronología se publicó el 19 de enero cuando la entonces candidata presidencial Keiko Fujimori puso el tema sobre la mesa:

¿Es viable otorgar el indulto?

Para el exprocurador Antonio Maldonado, el presidente Pedro Castillo sí podría conceder el indulto humanitario a Alberto Fujimori, después de que una junta médica verifique que el estado de salud es grave. Indicó además que no es necesario que la familia lo solicite, y que esto podría proceder de oficio.

“El estado de derecho no está motivado por el ánimo de la venganza ni en función de la arbitrariedad, ante una situación en que una persona condenada estuviera sufriendo de una enfermedad terminal o grave, en que las condiciones solo agravaran la enfermedad grave”, dijo.

Maldonado explicó que la expectativa de un indulto humanitario en el caso de Fujimori no requiere de un procesamiento especial, y que debe estar vinculado a su condición de salud.

“El indulto solo se remite a poner en paréntesis la pena, pero no se refiere a la condena, su estado de salud no lo va a convertir en inocente”, apuntó.

“El Estado no tiene que esperar a que alguien se lo pida, el Estado tiene que darse por notificado, de oficio, si fuera esa situación, si hipotéticamente fuera la situación, el estado de salud grave, lo que una junta médica dictamine, el Estado debería actuar de muto propio”, agregó.

El también exprocurador Yván Montoya coincidió en que no es requisito que la familia solicite el indulto para Fujimori, y que el gobierno podría solicitar que una junta médica evalúe el caso del expresidente.

“Puede ser de oficio que la comisión solicite un nuevo informe médico, lo más importante es que sea un médico que sea lo más objetivo posible, independiente y haga un informe riguroso de la enfermedad”, afirmó.

Montoya consideró que después, esto quedará en manos del presidente, “y escuchando a los ministros, bajo esas condiciones no habría obstáculo para el indulto a Fujimori, si hay un cuadro agravado, irreversible, que se torna inmanejable, tal vez pueda tomarse esa decisión, el expresidente no debería morir en la cárcel”.

El letrado resaltó la importancia del pronunciamiento de los médicos que revisarían a Fujimori, pues el indulto solo procedería si las condiciones de salud son graves. Recordó que la ministra de Cultura Gisela Ortiz es familiar de una de las víctimas del crimen en el caso La Cantuta y señaló que “sería un gesto humanitario increíble para el país”.

“Supongo que el ministro lo ha dicho con plena conciencia de que en el gabinete está Gisela Ortiz, sería una situación extraordinaria si la ministra, el ministro, el presidente, previo informe médico evalúan la situación del expresidente (...) sería un gesto humanitario increíble para el país, previa condición que su enfermedad haya agudizado, sobre la base de escuchar a los familiares de las victimas, es un momento interesante de dar lecciones de dar humanidad”, expresó.

En tanto, el abogado penalista Andy Carrión consideró que el tema del indulto a Fujimori es complejo y recordó el antecedente de PPK, cuando este beneficio fue revocado por el PJ.

Según dijo existe la dificultad jurídica de que Alberto Fujimori fue condenado por delitos graves, y en esos casos no podría proceder el indulto humanitario.

“Si uno lee la sentencia condenatoria, ha sido condenado por homicidio calificado y secuestro, no dice que es condenado por lesa humanidad, el problema es que algunos apartados se menciona que estos delitos también podrían constituir delitos de lesa humanidad”, afirmó.

Carrión agregó: “El indulto tiene esa imposibilidad del delito grave, salvo puedan interpretar de manera distinta, en el sentido que no habría cometido delito de lesa humanidad y correspondería indultarlo simplemente, podría tener una salida ahí el gobierno, en caso lo vean conveniente”.

Las veces que se habló del indulto a Fujimori

En junio de 2013, la familia de Alberto Fujimori solicitó el indulto humanitario al entonces presidente Ollanta Humala; sin embargo el requerimiento fue rechazado por el jefe de Estado.

Esto ocasionó que la excandidata a la presidencia Keiko Fujimori critique a Humala y su decisión de negar el indulto. Según dijo en ese momento, la negatoria del indulto “fortalecería” a su partido político.

“Durante estos ocho meses, que ha durado este proceso de solicitud de indulto, en el camino hemos recibido muchas trabas. Viendo en retrospectiva entendemos que todas las trabas que inicialmente pensábamos que eran iniciativa de los ministros, fueron (parte de) una emboscada del presidente para intentar debilitarnos, pero no lo lograron”, manifestó.

En la campaña electoral de 2016, Keiko Fujimori volvió a referirse al indulto a su padre, pero esta vez para asegurar que no lo indultaría de llegar a la presidencia.

“Tienen mi palabra, que vale mucho más que cualquier documento o firma. Con mi palabra basta, pero si en su momento se requiere (ponerlo en escrito), lo evaluaremos”, dijo.

Este año, al volver a postular a la presidencia, puso el tema del indulto en agenda, al señalar que, de ganar los comicios, le otorgaría el indulto, y de no alcanzar la presidencia, le pediría al candidato que gane las elecciones.

“He dicho en varias oportunidades que confiaba en que la libertad de mi padre se iba a dar a través de la vía legal o judicial y de la vía constitucional, pero después de todo lo que hemos visto y lo que hemos pasado, yo creo que ya es suficiente lo que ha vivido mi padre y eso me ha hecho cambiar de opinión”, sostuvo Keiko Fujimori.

El 24 de diciembre de 2017, el expresidente Pedro Pablo Kuczynski le otorgó el indulto a Alberto Fujimori, pero la libertad le duraría poco. El 3 de octubre de 2018, el juez supremo Hugo Núñez Julca, a cargo del Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Suprema, resolvió anular el indulto y ordenar el retorno de Fujimori a la prisión de la Diroes para concluir su condena.

En su resolución, el juez advirtió irregularidades para otorgar el indulto a Alberto Fujimori. Consideró que existían incongruencias a la Junta Médica y los informes que emitían. Además, sostuvo que se atribuían funciones que no correspondían al recomendar el indulto a Fujimori Fujimori, pues era una prerrogativa de la Dirección de Gracias Presidenciales del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.

El magistrado también indicó que la decisión del indulto se produjo en un tiempo breve, respecto a los plazos con los que se cuenta para estos casos. El juez apuntó que Kuczynski tramitó otros indultos en un periodo de 1 mes con 26 días, y el de Fujimori demoró 13 días. Recordó que la gracia presidencial se otorgó en un contexto de crisis política, donde PPK afrontaba un pedido de vacancia.

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