A casi dos meses de la denuncia hecha por el ex comandante general del Ejército José Vizcarra sobre injerencia del Ejecutivo en los ascensos en las Fuerzas Armadas (FF.AA.), el presidente Pedro Castillo admitió, ante el fiscal supremo adjunto Ramiro Gonzáles y el procurador general Daniel Soria, que tuvo interés en este proceso. Aunque remarcó que fue solo para conocer detalles y no para beneficiar a militares allegados a su persona.