Mañana empieza un nuevo año y para muchos es sinónimo de cambios y metas nuevas, sobre todo en lo que se refiere a salud y bienestar. Nos planteamos objetivos con la mejor de las ganas: tomar más agua, comer más ensaladas, hacer deporte, dejar las gaseosas, bajar esos kilitos de más… Y sacamos el papel y escribimos estas metas que se ven prometedoras en la teoría, pero quizás en el camino vamos viendo que no lo estamos logrando. Entonces nos desmotivamos y terminamos tirando la toalla. ¿Te suena familiar?
Resulta que nosotros, seres humanos, queremos todo para ayer. No nos damos el tiempo a entender de que todo cambio implica un trabajo interno y externo. Romper o dejar de lado hábitos con los cuales hemos convivido por años no es cosa fácil, pero tampoco imposible. Si queremos dejar la gaseosa y reemplazarla por agua entonces no empecemos con 2 litros de golpe; trata de tomar 2 a 3 vasos al día la primera semana, luego aumentar uno más la siguiente y así hasta que logres tus 2 litros y hayas dejado la gaseosa totalmente.
Lo mismo pasa con el peso y es algo que me veo constantemente en consulta. El objetivo es bajar 10 o 15 kilos. Cuando pregunto cuanto tiempo tomó subir ese peso la respuesta varia: pueden ser 10 mes, 18 meses o hasta 4 años. Pero queremos el resultado en 1 mes y nos olvidamos de que esa subida también fue un proceso, y si queremos regresar a nuestro peso saludable y mantenerlo a largo plazo, entonces tenemos que ir a la inversa, poco a poco, hasta regresar al peso deseado.
Con esto te quiero decir, y más que nada recordar, que crear hábitos es un proceso. No pasa de la noche a la mañana. No es fácil y hasta podría llegar a ser incómodo y retador. Pero se puede si es que hay paciencia y perseverancia. En lugar de buscar metas gigantes y quizás poco realistas para este 2020, te propongo enfocarte en pequeños cambios que puedes hacer día a día: toma 1 vaso más de gua, usa las escaleras en lugar del ascensor, cambia las galletas de la media tarde por una fruta o un puñado de almendras, antes de reaccionar para un segundo y respira profundamente, deja el celular 30 minutos antes de irte a dormir y empieza a leer un libro.
Date el tiempo de realmente pensar qué es lo que quieres y cuál es la mejor manera de alcanzarlo dentro de tus posibilidades. Regálate este año nuevo la intención de querer cambiar de manera saludable y sostenible. Invierte en aprender sobre nutrición y cómo alimentarte adecuadamente. Proponte hacer deporte, el que más te guste, y empieza de a pocos, sin exigirte demasiado. Recuerda que si ponemos objetivos pequeños y factibles, el camino se hace más llevadero, alcanzable y duradero. ¡Feliz Año!
Maca Bustamante, Nutricionista: @macawellness