"Queremos darles las herramientas para que puedan enfrentarse a un mundo diferente", dice la profesora de quinto grado de primaria Mónica Lanchipa. A la izquierda: una animación de ella misma para hacer las clases más amenas.
"Queremos darles las herramientas para que puedan enfrentarse a un mundo diferente", dice la profesora de quinto grado de primaria Mónica Lanchipa. A la izquierda: una animación de ella misma para hacer las clases más amenas.
Vanessa Cruzado Alvarez

Mónica Lanchipa Bergamini, tacneña de 55 años, entiende mejor que nadie que la educación transforma vidas. No solo porque ejerce la docencia desde hace 35 años, sino también porque la pedagogía cambió su vida. Desde niña siguió de cerca el trabajo de sus padres: una profesora y un director de colegio. “Veía el trabajo que tenían con sus alumnos. En casa, los ayudaba a corregir exámenes. Poco a poco me fue enganchando la carrera y ese amor por la educación”, cuenta con la misma emoción de cuando salió del colegio, en 1980, y decidió seguir la profesión familiar.

Contenido Sugerido

Contenido GEC