Fe, recogimiento y multitudes caracterizaron la Semana Santa en Ayacucho
La procesión del Cristo Resucitado llevada a cabo el pasado domingo puso fin a las celebraciones de la Semana Santa en Ayacucho, una de las más importantes del calendario religioso peruano, que dura nada más y nada menos que once días y que es Patrimonio Cultural de la Nación desde el año 2022.
Un final que estuvo marcado por la multitud que se congregó antes del amanecer en la Plaza Mayor de Ayacucho para acompañar el último desfile procesional. En el que más de 400 voluntarios, entre hombres y mujeres, pasearon en hombros un anda monumental de 15 toneladas.
Devotos como el ayacuchano Richard Saenz, quien lleva varios años participando del grupo de cargadores del anda, confesó que lo hace por devoción: “Todos tienen algo, un familiar o alguna intención que pedirle al Señor”, me dice desde la parte frontal del anda donde se ha ubicado desde las diez de la noche para alcanzar un espacio.
Mientras en las afueras se encendían los troncos de retama en la tradicional chamizada, en la Catedral comenzó la última Eucaristía de Semana Santa. Antes de las 4 de la madrugada, cientos de fieles se ubicaron en las bancas y de pie, apretujados, solo para alabar a Cristo entre aplausos, oraciones y cantos en castellano y quechua.
La salida de la imagen fue algo accidentada. Por el excesivo peso del anda, esta se inclinó a pocos pasos de la puerta del templo y se tambaleó. Lo que provocó gran nerviosismo entre los creyentes, quienes no dudaron en alentar a los cargadores al grito del “sí se puede”. Fue así como se logró recorrer el perímetro de la plaza, con pausas que permitían tomar un respiro y algo de fuerza, fuegos artificiales y un ambiente repleto de fervor.
Lo más visitado en Semana Santa
Ayacucho es uno de los destinos peruanos más visitados de la Semana Santa. Según Smith Pariona, asistente regional del servicio de Información y Asistencia al Turista (IPERÚ) de Promperú, los visitantes se interesaron mucho en el circuito Wari-Quinua, que integra arqueología, historia y artesanía: “Es un circuito indispensable que solo durante el feriado de Semana Santa ha recibido más de 20.200 visitantes según los registros del Santuario Histórico de la Pampa de Ayacucho”.
A la par, durante el feriado, IPERÚ recibió muchas consultas sobre planes en la ciudad. Pariona indica que hay mucha gente que se concentra exclusivamente en las actividades religiosas de la Semana Santa, como las procesiones, y que complementa su itinerario con alternativas como las ferias de artesanía y gastronomía o las exposiciones y concursos que se organizan. En ese sentido, el Valle de Huanta, donde el Viernes Santo se realiza una escenificación del calvario, ha generado mucho interés.
En cuanto a los atractivos de naturaleza destaca el cenote de Chapalla. “Lo que fue decepcionante para los turistas es no poder visitar Millpu ya que, por las lluvias, las aguas no se veían turquesas. En años anteriores este atractivo fue la estrella de la Semana Santa, pero la festividad ha caído en marzo y la mejor época para visitarlo comienza en abril”, explica Pariona.
Esto ha sido parte de nuestro último viaje a Ayacucho. Próximamente te contaremos qué otras cosas puedes hacer en este destino peruano imperdible. Si quieres conocer más datos viajeros sígueme en las redes:
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Foto destacada: Gihan Tubbeh / PROMPERÚ