¡No a los juegos pirotécnicos!
La creatividad de los peruanos no solo tiene fines positivos sino también negativos. Vemos, por ejemplo, cómo todos los años se crean nuevos pirotécnicos, más peligrosos que los anteriores. Esta vez le tocó el turno a un mortal cohetón llamado “Guty” y otro denominado “mamama rata”, más potente que la “mamá rata” o la “rata blanca”. Estos productos pueden, como daño mínimo, destrozar la mano de quien los manipula.
Las mascotas, por no mencionar otros ejemplos, también sufren las consecuencias de las detonaciones que suelen darse en el mes de diciembre. El ruido que provoca estos cohetones no solo son dañinos para el oído de cualquier persona sino que afectan la tranquilidad e incluso la salud de los perros, gatos y palomas (u otras aves), más aún de aquellos que no tienen hogar y están en la calle expuestos a estas situaciones.
Los perros reaccionan con gran nerviosismo a las detonaciones, pues su oído es mucho más potente y sensible que el del ser humano. Escucha tres veces más alto que nosotros. Entonces una de estas explosiones pueden perturbarlos mucho y afectar la sensibilidad de su oído. Además, les genera miedo y estrés.
En el momento de estas explosiones, las aves vuelan despavoridas, se desorientan y no saben dónde protegerse. Muchas de ellas mueren porque caen o se estrellan al chocar contra paredes u objetos. Recordemos que las noches son los momentos en los que las aves duermen y cuando más se escucha la explosión de piroténicos.
¡Cuidado!
Desde las aves hasta los perros, por curiosidad, pueden comer los restos de estos cohetones y generarles serios problemas en el aparato digestivo, sino la muerte.
Diciembre es el mes en el que más perros huyen de casa porque al detonar un explosivo su reacción es escapar, salir del espacio donde se encuentran porque saben que algo sucede y su instinto de supervivencia los lleva a huir.
Recomendaciones a tener en cuenta
- No compres ningún tipo de productor pirotécnico. No seamos parte de ese comercio ilegal que representa una tortura para nuestros animales menores.
- En Noche Buena y Año Nuevo procura que tu mascota esté acompañada de la familia.
- Mantén cerrada la puerta de casa, pero por si acaso colócale un collar con sus datos, por si llegara a escapar y así se le pueda localizar.
- No lo dejes solo en casa, pero si no tienes otra opción, que no sea por mucho tiempo. Durante tu ausencia, déjale agua y su alimento concentrado. Deja encendida la radio con el volumen moderado paro que lo haga sentirse acompañado.
- Acondiciona un lugar para tu mascota. Puede ser una caja donde pueda meterse y salir por su propia voluntad.