Judas Priest: un repaso a su discografía más emblemática
La expectativa por el concierto de Judas Priest es alta debido a la importancia histórica de la banda y a su actual vigencia. Esta trayectoria se ha construido con una enorme, emblemática y en general sobresaliente discografía, por ello hice una consulta entre algunos headbangers priestianos de siempre para indagar sobre los temas más significativos desde sus perspectivas y alguno olvidado o relegado que les gustaría que se interpretase en la noche del evento. Acá los himnos disco a disco.
Rocka Rolla (1974). Disco debut de la banda, aún situado dentro del hard rock y el rock psicodélico de la época. Poco valorado en su tiempo y en sí todavía un trabajo temprano que sin embargo en perspectiva nos deja unos temas muy rescatables. Los que más se han mencionado son Never Satisfied y Diamond and Rust (aunque se trate de un cover de Joan Baez y que aparece en solo algunas ediciones del disco). A mí personalmente me gusta el tema título Rocka Rolla, es muy rock and roll y diferente de lo que harían luego, pero debe ser por eso.
Sad Wings of Destiny (1976) Este es el verdadero comienzo de la discografía metal de Judas. Gana con mucho Victims of Changes, que es en su génesis dos temas fusionados; The Ripper que es su primer tema cien por cien clásico de heavy metal sin atenuantes; y Genocide. Yo coincido con estos tres al completo.
Sin After Sin (1977) es su primer disco con CBS/Sony, y salto a las grandes ligas. Queda señalado con Dissident Aggressor, uno de los más grandes temas de toda la historia del heavy metal. También acá aparece Diamonds and Rust. Además yo siento especial predilección por el tema Sinner, otro clásico que se adelanta a su época.
Stained Class (1978) Un disco, ya definitivamente dentro de la era del heavy metal clásico, que es recordado sobre todo por Exciter y muy cerca por Beyond the Realms of Death. Coincido plenamente.
Killing Machine/Hell Bent for Leather (1978-79) Este, trabajo que se publicó con dos diferentes nombres, uno para Inglaterra y Europa en general y otro para Estados Unidos (siempre más ñoño)y algunos cambios en el listado de los temas. Es recordado por Delivering The Goods (recuerdo mucho la versión cantada por Halford y Sebastian Bach de Skid Row en los 90) y el cover de Fleetwood Mac, The Green Manalishi (with Two Prong Crown).
British Steel (1980) es el disco que los hace entrar en la década de los 80 liderando a toda la nueva generación de bandas influida por ellos, entre los que destacaba claramente Iron Maiden, aun con Paul Di’anno. De este disco primer clásico de la década son señaladas Metal Gods, Grinder, Breaking the Law y Living after Midnight. Yo personalmente disfruto mucho Rapid Fire, me parece un tema perfectamente heavy metal.
Point of Entry (1981) es un disco poco apreciado entre los metaleros y es entendible pues la banda venía endureciendo su propuesta, creando al metal moderno y este trabajo los devuelve a una era anterior, a la época del hard rock que parecía ya superada, no fue tan bien recibido en su momento, pese a tener buenos, aunque no violentos, temas. Heading out to the Highway y Desert Plains son las más mencionadas y yo personalmente coincido con tales cortes. Es un disco que hay que escuchar con calma.
Screaming for Vengeance (1982) Quizás porque el resultado del anterior no fue lo que esperaron el siguiente trabajo es lo contrario. Incluso su título es una declaración acerca de lo que estaban buscando. Este es uno de los discos definitorios del sonido de la década. Heavy metal sin atenuantes de la primera a la última nota. Acá es difícil señalar algún tema en concreto, todos son geniales, todos son clásicos. Haciendo esfuerzos se puede enfatizar You’ve got Another Thing Commin’, Electric Eye, Riding on the Wind, Devil’s Child y Bloodstone. Pero en realidad todos los temas apuntan muy alto y por su año de edición coincide con el momento de la primera gran universalización de la cultura headbanger.
Defenders of The Faith (1984) Este trabajo es como la continuación y perfeccionamiento del anterior pues todas las líneas matrices se mantienen y además está dentro de la edad dorada del heavy metal en la época en la que muchas bandas estaban sacando discos que se volverían clásicos inmortales en una cultura que se consolidaba por sí misma en torno a un canon musical. Freewheel Burning, The Sentinel, Jawbreaker (cuando se rebeló muchos años después lo que el tema significaba le chocó a muchos), Love Bites. Yo le tengo un cariño especial, porque fue el primer disco completo que escuché de Priest y la primera canción de la banda que conocí, Freewheel Burning, está en este. Como no levantar los cuernos al oír las líneas de Heavy Duty “metal rules the land”.
Turbo (1986) en general es considerado un bajón e incluso la banda misma no lo llegó a apreciar mucho pese a ser del periodo de mayor popularidad del grupo. Se trata de un disco demasiado concesivo con el mercado y la moda de aquella época. Muy “americano”. Era la época del glam hard rock en los Estados Unidos y tomaron muchos elementos pop para incluirlos en los temas, un disco quizás sobrepoducido (incluso se planteó inicialmente como disco doble). Fue tan comercial que se pretendió que uno de sus temas, Reckless, estuviera en la banda sonora de Top Gun, blockbuster de Hollywood de la época. Sin embargo es un trabajo que se ha revalorizado con el paso del tiempo. Hoy se le entiende como un producto de su época y se rescatan algunos cortes. El más común es Locked In, aunque están también Out in the Cold. La banda suele interpretar Turbo Lover en sus conciertos.
Ram it Down (1988) es un disco injustamente sobreseído. Es un gran trabajo, último con Dave Holland en la batería, un retorno al heavy metal clásico y un preludio de lo que se estaba ya cocinando en Priest. Será por eso que las elecciones cambian bastante, pues se mencionan muchos temas como Blood Red Skies, Heavy metal y Come and Get It. A mí me gusta personalmente I’m a Rocker que tocan aún en algunas giras.
Painkiller (1990) Y bueno este es el disco del metal. El non plus ultra de Judas Priest y con probabilidad de la historia del metal clásico, (al lado de Reign in Blood, Powerslave, Operation Mindcrime, Among the Living o Altars of Madness y pocos más). Aunque se ha intentado destacar algún tema, todos coinciden que como unidad este disco, primero con Scott Travis en la batería, es de por sí un éxito de principio a fin. Y yo coincido plenamente. Painkiller es el disco perfecto de la historia del metal clásico, la obra maestra de todo el movimiento metal y todos los temas se sitúan en el mismo nivel de excelencia. Y así se mantiene hasta el día de hoy.
Jugulator (1997) aunque Halford no cantó en este disco y en la actual formación de la banda no se interpretan temas de este periodo es bueno mencionarlo, porque es un disco que divide a los headbangers. Muchos desprecian este trabajo, otros lo aprecian pero no lo consideran Judas Priest y otros más lo consideran Judas, pero muy diferente a lo que han hecho antes y no lo valoran demasiado bien. Es en donde hemos encontrado mayor diferencia de opinión. Es complicado señalar temas. Los que se atreven a mencionar algo señalan Burn in Hell y Death Row. Ripper Owens cantante del álbum gusta de Bullet Train. Yo rescato esencialmente uno: Cathedral Spires, tema final del disco y desde mi perspectiva uno de los mejores de la historia de la banda contando todos sus periodos.
Demolition (2000) fue unánimemente denostado por todos los consultados. Yo estoy de acuerdo y sirve para revelar que los integrantes son finalmente humanos y no pueden ser perfectos. Este disco tampoco fue grabado por Halford y es no solo de un estilo diferente sino, lo realmente malo, muy poco atractivo. No grabarlo hubiera sido lo mejor.
Angel of Retribution (2005) fue bastante aclamado en general y sirvió de relanzamiento de la banda en pleno revival de los sonidos clásicos que se vivió en la década pasada. Devuelve a Judas Priest a su esencia heavy además de marcar el retorno de Robert Halford. Es un buen disco en el que destacan Judas Rising, Hellrider y Demonizer. Yo disfruto, además, de Lochness, un tema que me remite a Cathedral Spires.
Nostradamus (2008) primer y hasta ahora único disco conceptual de la banda construido sobre la vida y pasión del adivino medieval Michel de Nostradamus. Un disco ambicioso pero que no llegó a su cota más alta. Mucha gente no le tuvo paciencia al trabajo. Se suele mencionar Prophecy como tema emblemático. Yo gusto del tema título Nostradamus, pese a la simpleza del estribillo. La idea es buena pero le faltó pulirla más, aunque cuidado con esto, el disco tiene sus hinchas.
Redeemer of Souls (2013) es un disco que también divide headbangers pero por razones menos conflictivas. Más allá de su incuestionable ortodoxia, a algunos les parece formidable y a otros, mediocre. Se le está concediendo el valor de ser un preludio a lo que se venía con Firepower. Se destacan varios temas como Reedemer of Souls, Halls of Valhalla y Battle Cry.
Firepower (2018) nos mató a todos. Cuando muchos pensaban que la banda ya no podía dar algo a la altura de sus antiguos clásicos, viene este disco que está al nivel de sus más grandes creaciones del pasado. Es verdad que no aporta ya nada nuevo en cuestión de estilo o sonido, pero hace algo quizás más importante, contribuye con grandes temas, que es finalmente de lo que está hecho el heavy. Es eso, se trata de un disco de absoluto e inspirado heavy metal. Todos los temas tienen un gran nivel. Se pueden destacar No Surrender, Children of the Sun y Never the Heroes.
Para mí está al nivel de energía y talento de Painkiller y camino a ser el mejor disco del metal del siglo XXI.
Sobre los discos más grandes de la banda hay un consenso esperable en British Steel, Screaming for Vengeance, Defenders of the Faith y Painkiller, a los que se viene sumando Firepower, lo que revela lo mucho que ha impactado el último trabajo.
En relación a los temas que la banda ha sobreseído y que toca pocas veces, hay una concurrencia de opiniones en que la peor de todas esas omisiones es la de Dissident Aggressor. Un tema extraordinario que tocan en vivo ocasionalmente. El otro omitido que desearíamos oír más veces es Exciter.
Hasta acá este breve repaso. Recuerden Judas Priest estará tocando el 30 de octubre en el Jockey Club. Las entradas están a la venta en los módulos Teleticket de Wong y Metro.
Algunos videos
Painkiller
(Yo jugaba en una maquina así en el Pin ball de Camino Real cuando era muy chico)