Somos Grau
Escribí semanas atrás sobre el descomunal sacrificio del héroe de Angamos. Miguel Grau se confesó en Los Descalzos ante el Padre Gual y marchó hacia la gesta y la muerte sin mediar queja ni postergación. Mostraba en aquella nota en El Dominical las cartas que el marino escribió a su mujer, Dolores Cavero, dando señas de su espíritu de buen padre y esposo. Su lumbre de notable caballero se puede ver en la sentida y elegante carta que le escribe la esposa del chileno Prat.
Un hombre que tenía mucho que perder con el sacrificio, tanto que incluso se perfilaba, según el rumor, como potencial candidato a la Presidencia en las elecciones de 1880 por el Partido Civil. Lo apunta Teodoro Hampe en su libro más reciente “Grau, el político”. La guerra se interpuso, pero el Perú ganó a su héroe más notable, mientras perdía a quien (valga la ucronía) hubiera podido ser nuestro estadista más eficiente, honrado y leal.
Así, un hombre pleno en su edad, en sus posibilidades y en su dicha familiar, se dio a sí mismo en ofrenda. La medida de su sacrificio es precisamente lo que lo engrandece y más aún la solidez de su conducta, pues Grau era un modelo de decencia y docencia cívica. Complicado hallar un parangón.
Bien. Se preguntarán por qué refiero a Grau si no es octubre y si ya conmemoramos su nacimiento. La razón es simple: Por tercer año consecutivo se realiza a nivel nacional la cruzada “Somos Grau, Seámoslo siempre” que busca, a través de casos de la vida diaria, difundir y promover los valores que caracterizaron al héroe durante su vida. Se trata de buscar a quien represente virtudes como la honestidad, la dignidad y la lealtad.
Si quieres proponer a alguien tienes aún un poco de tiempo. Aquí las bases: http://www.somosgrau.pe/wp-content/themes/somos-grau/docs/bases-del-concurso-somos-grau-2014.pdf Y aquí la página: http://www.somosgrau.pe/