La 'U' post Comizzo

“La decisión estaba tomada hace una semana“, “nos sentimos estafados“, “pezuñento y cobarde“. Sea cual haya sido la verdadera razón por la que Ángel David Comizzo decidió alejarse de Universitario, no merecía irse de esta manera. Aunque un grueso sector de la hinchada exigía a gritos su salida tras la serie de fracasos que había encadenado en la temporada, el artífice del título del 2013 no debió abandonar la ‘U’ así.
¿Qué pasó para que en menos de tres meses el gran proyecto con el cual inflaban el pecho Ayar López Cano y Rocío Chávez, que tenía como meta ganar la Libertadores en cuatro años, se destruyera en mil pedazos? Mucho. Demasiado diría yo. Evidentemente, la relación cuerpo técnico-dirigentes se debilitó y los malos resultados deportivos hicieron que no hubiera manera de disfrazarla. Aunque la Copa Libertadores suele ser una máquina trituradora para los entrenadores peruanos, hubo un crac que rompió el eslabón que unía al técnico, la administración temporal y los jugadores.
En un informe que se publica en Deporte Total se da cuenta que el ‘feeling’ con el grupo se había roto. El perdón a Alexi Gómez, la manera cómo se fue Galliquio y el trato que el técnico le dispensó al Puma habrían sido parte de los detonantes. A ello se añaden las torpezas cometidas en la planificación de la campaña, el poco fuego que han dado hasta la fecha los refuerzos y el escaso respaldo que habría sentido Comizzo de parte de la AT.

elcomercio_2014-03-07_#02 by Pedro Ortiz Bisso

elcomercio_2014-03-07_#03 by Pedro Ortiz Bisso

¿Influyó la propuesta del Monarcas? Probablemente sí [Actualización: 7/3, 8:14 p.m. El programa Raza Deportiva de ESPN anunció hace unos minutos que Comizzo llegará a México este domingo y será presentado como técnico el lunes], pero no me atrevería a señalar que fue una sola la razón que determinó el quiebre del matrimonio Comizzo-Universitario. Además, la manera como se ha producido la separación -prácticamente arrojándose los trastos sobre la cabeza- habla de heridas mucho más profundas.
Creo que la salida de Comizzo se va a sentir. Luego de muchos años, Universitario parecía tener encaminado un proyecto con los jóvenes en primera fila. Es cierto que este año se equivocó mucho y las derrotas jugaban en su contra; sin embargo, si verdaderamente existía fe en el proyecto, había que sostenerlo a como dé lugar, como ocurrió el año pasado cuando muchos pedimos la salida del técnico tras la goleada sufrida ante Cristal. Los proyectos a largo plazo no son una luna de miel permanente, tienen sus subidas y bajadas,  y si existe fe verdadera en el mismo, es deber de los dirigentes aguantar lo más que se pueda.
Ahora que todo el mundo anda con la cabeza caliente probablemente no se reconozca, pero dentro de algún tiempo, ya con la cabeza fría, estoy seguro de que se valorará en su real dimensión lo que significó obtener un campeonato con un equipo tan cortito, repleto de muchachos y en la situación de virtual bancarrota en que se encuentra la institución.
No conozco personalmente a Comizzo, pero mi impresión es que se ganó en la cancha lo que tiene, y no hay mucha gente en el mundo del fútbol que pueda vanagloriarse de ello.

HUELE A PELIGRO

El futuro es una moneda al aire. La AT ha señalado que se tomará su tiempo para elegir al nuevo entrenador; es más, el jueves lo único concreto que se dijo es que se lo nombrará antes del Torneo Apertura. Lo cierto es que si este domingo se suma una nueva derrota ante Cienciano y ocurre lo mismo después ante Paranaense, la presión va a ser mayor.
El nuevo entrenador, ha dicho Jorge Vidal, debe tener un perfil de “formador”. Pero el cambio no será tan simple: tendrá que enfrentar la circunstancia de trabajar con un plantel que no ha elegido y sin la posibilidad de traer un refuerzo más, ya que las bases señalan que solo puede incorporarse a dos extranjeros en agosto, previa rescisión de contrato con dos foráneos del plantel (cortar contratos a mitad de un torneo no es algo muy fácil, al contrario, puede resultar muy costoso).

La ‘U’, es obvio, se reforzó mal. Cualquier entrenador con dos dedos de frente señalará la necesidad de contratar un mediocampista ofensivo y un delantero. En el medio local no hay nada a la vista, así que la única opción es mirar hacia afuera. Entonces, no solo tendrá que traerse a un entrenador con perfil de formador, sino también a uno que no cueste mucho y, encima, tenga que trabajar sin mayores mejoras en el plantel.

 OPCIONES REALES

De la infinidad de nombres que se han soltado, es necesario hacer una decantación. Gareca sería un orate si volviera al Perú. Después de todo lo que ha ganado en Argentina, sería un retroceso en su carrera trabajar en nuestro medio. Otro nombre descabellado es el de Eduardo Berizzo. El ex asistente de Bielsa es, como señalaba Daniel Peredo, candidato de fuerza para sustituir a Jorge Sampaoli en la selección chilena (siempre y cuando este se vaya a dirigir a Europa luego del Mundial, como parece ser su deseo), así que táchenlo de su lista. 

No creo que la AT tenga en sus planes a Salvador Capitano, un técnico a quien muchos nostálgicos añoran, pero que lleva fuera del primer plano un buen tiempo. Habrá que ver si Carlos Compagnucci, asistente de Mauricio Pellegrino en Estudiantes, se anima a venir al Perú. Quien prácticamente se ha ofrecido con lacito y todo es Javier Torrente, un técnico ‘bielsista’ conocido por la AT, pero que lleva más de un año sin trabajar. En cuanto a Jorge Amado Nunes, aunque Jorge Vidal -según “Líbero”- ha hecho graves acusaciones en su contra ,  se sabe que lleva un buen tiempo en el país dedicado a sus negocios.

La situación es muy delicada. Me temo que el equipo está en peligro de caer en manos de algún aventurero dispuesto a hacer currículo con el campeón… como ocurrió con Comizzo a principios del año pasado. Esa vez la apuesta funcionó, ¿nos arriesgamos de nuevo?

Espero sus comentarios. Un abrazo para todos.

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