Entrevista a Ramón Salaverría: “En Internet los medios no desaparecen, se transforman”
Para el español Ramón Salaverría, profesor de periodismo y experto en ciberperiodismo, Internet recién está entrando en una etapa de madurez como plataforma de información y por ello cobra importancia la figura del periodista como “intérprete de la realidad”. Hace unas semanas estuvo en Lima para dictar una charla organizada por la Universidad de Piura y Katherine Subirana conversó con él. Si te interesa el tema, sigue leyendo.
Tras la información difundida por Wikeleaks muchos se animan a hablar de una reconfiguración del periodismo ¿Qué opina de ello?
El fenómeno de Wikileaks supone un refuerzo para el papel profesional del periodista y los medios de comunicación. Este caso ha demostrado que las redes tradicionales son perfectamente compatibles con las redes digitales.
En el caso del Watergate ‘Garganta profunda’ dio información importante a un solo medio, en exclusiva. ¿Wikileaks puede poner en riesgo la exclusividad de la fuente?
Si Assange hubiera dado la noticia a un solo medio, hubiera sido una exclusiva de alcance monumental. Pero en este caso me parece muy saludable, desde el punto de vista de la madurez de la red como plataforma para la información, pues se ha visto que los movimientos tipo Wikileaks son compatibles con un periodismo vigilante. Y se hace evidente la necesidad del periodismo como cuarto poder que controla a los otros poderes, y por la necesidad de trabajar dicha información a nivel periodístico. Los documentos eran solo la materia prima y el periodismo convirtió todo eso en un producto que posteriormente tendría grandes consecuencias, a nivel político, social y diplomático.
¿Wikileaks reivindicó el papel del periodista?
Internet no está matando al periodista. Sigue siendo necesario el papel del periodista como reportero, pero también hay un papel del periodista como interpretador de la realidad. En esta ocasión estamos más en esta segunda categoría, que me parece igualmente relevante y profesional. Debe considerarse como un fenómeno que da valor al papel del periodista como interpretador de la realidad.
Usted siempre recalca que en Internet se veía más la función del periodista de interpretar noticias, sin embargo se suele decir que la interpretación es para las ediciones impresas, y que en la web se deben dar notas informativas e inmediatas…
Estoy muy poco de acuerdo con eso. Internet es una plataforma que tiene las condiciones tanto para la información puntual, de última hora como para información interpretativa. Se ha extendido la idea de que en Internet solo hay cabida para la información puntual y de última hora es porque solo se ha hecho esto los últimos años, sobre todo por una razón económica.
Pero tal vez es el tipo de información a la que más recurre la gente, por ser más puntual y tal vez por no profundizar tanto.
Siempre se dice que en Internet solo se leen textos cortos, pero yo creo que lo importante no es si el texto es corto o largo, sino si es bueno o es malo. La gente al final tiende a valorar la información de calidad, sobre el tamaño de los textos.
¿Los medios impresos deben tener los mismos criterios para jerarquizar las noticias en el papel y en la web?
Los medios deben cuidar una cierta homogeneidad y ofrecer los mismos estándares de calidad en su versión impresa, web o para los móviles. Eso no significa que en todas las plataformas se tenga que dar exactamente lo mismo, pues hay información que debe tener más tribuna en una plataforma que en otra.
Pero la jerarquización de las noticias en las distintas plataformas puede ir en desmedro de la marca…
Lo ideal es que ambas plataformas no se tornen una especie de doctor Jekill y mister Hide: no puedes pensar que son dos medios distintos, y eso tiene que ver no solo con la jerarquización, sino también con el estilo. Se puede encontrar temas distintos porque el público es distinto o más variado, pero en términos de calidad deben ser homogéneos.
¿Esta homogeneidad es el resultado de la integración de redacciones?
Es el resultado de que ambas redacciones pueden comunicarse con mayor fluidez y los editores trabajan desde una perspectiva multiplataforma. En la medida que los equipos de redacción estén no solo disgregados, sino también separados físicamente, la armonía en los mensajes resulta mucho más complicada. En tratamientos informativos como el caso de Wikileaks, ese tipo de planificación informativa multiplataforma solo es posible en la medida que sus equipos están bien integrados.
Pero no existe la fórmula para la integración…
Cada proceso de convergencia enseña que las medidas de integración deben ser específicas y que no deben darse por terminadas cuando se empiezan a poner en práctica.
Las plataformas se complementan, no es que una se superponga a la otra, pero esto implica también una evolución de los medios impresos…
En los últimos años se mandan mensajes de la muerte de determinados medios y plataformas, pero olvidan que la historia del periodismo dice que los medios no desaparecen, sino que se adaptan. En ese sentido a lo que nos encaminamos es a la adaptación de los medios a internet. Durante años los medios han actuado como si internet no existiera, y han sido muy reacios a cambiar sus procesos, sus parrillas informativas, etc., probablemente los próximos años las plataformas digitales van a ser los medios por los que la gente adquiera la mayor parte de la información, pero eso no significa que los medios pre existentes vayan a desparecer. Eso sí, desde el punto de vista de los lenguajes y la producción informativa van a tener que cambiar.
Ahora los periodistas y los medios estamos más expuestos a las críticas del público ¿Cómo debe responder el medio?
Uno de los cambios que ha experimentado el periodismo es que los periodistas han adquirido mayor protagonismo en el proceso informativo. Ahora pasamos a una nueva dinámica periodística para brindar información, pero también porque ahora podemos escuchar lo que dice el público de nuestro trabajo. Sería muy saludable que los periodistas participaran, por ejemplo, de los espacios de comentarios de las notas de su autoría.
Pero el trato directo con el público no es algo para lo que te preparen en la universidad, o en el medio en el que trabajas…
Hemos pasado de un modelo de periodismo unidireccional, con los primeros años de Internet que eran solo interactivos, a uno participativo. Los periodistas ahora se ven obligados a responder.
¿Hasta qué punto el periodista participa como periodista de un medio o como persona natural dentro de las redes sociales?
Bueno, esta doble identidad es difícil de lidiar: a veces uno no sabe si habla a título personal o a nivel corporativo, y algunos medios establecen protocolos para ello. Un periodista es profesional pero también es ciudadano, tiene amigos, familia…y tiene derecho a participar en redes sociales teniendo amigos y compartiendo fotos y comentarios, pero también debe saber que hay diferente tipo de esferas en el que sabe que si comparte información que tiene su origen en el ámbito profesional, debe hacerlo con una serie de estándares profesionales.
En el caso de los medios que participan en las redes sociales, ¿cuál es el trato más adecuado que deben tener estos con los usuarios?
Es lógico que sean sobrios, pero no tanto. El uso que hacen los medios es auto promocional: comparten su información, pero no aprovechan otras facetas de las mismas, como la interacción de sus lectores. Están explotando poco los alcances. Hay medios como la BBC, o “The New York Times” que tienen a profesionales manejando sus cuentas, y generan una cuenta por sección, y cuentas de los periodistas con el nombre de la persona seguida de las siglas del medio para que el público los identifique corporativamente.
¿Las plataformas digitales de los medios o los medios web deberían tener libro de estilo?
Internet es un medio aún adolescente porque no tiene estándares de calidad bien asentados. Ha funcionado adaptar los parámetros existentes a la web, sin embargo cada vez está más claro que el trabajo periodístico en la web tiene aspectos específicos como los protocolos de asociarse con las fuentes o la definición de los géneros periodísticos…hasta donde yo veo creo que es conveniente que lingüísticamente las plataformas de los medios sean homogéneas, pero deben darse indicaciones procedimentales, deontologías y profesionales específicas para cada una de ellas.
¿La inmediatez o los nuevos medios por los cuáles podemos difundir el mensaje nos están haciendo perder rigor?
Es cierto que existe una ensoñación tecnológica y en muchas ocasiones la gente está más pendiente de cómo llega la información que del proceso de producción del mensaje. Los periodistas no deben estar tan preocupados por la herramienta como por el mensaje. A veces es justificado que hagamos más lento el proceso de producción para dar un contenido profesional. Muchos contenidos que circulan en la web ahora no parece que sean contenidos acabados. La web va evolucionando rápidamente.
¿Qué tan sencillo es enseñar periodismo digital ahora?
Soy profesor universitario y una de mis preocupaciones es esa: que no se queden en la espuma de la herramienta, y que entiendan que no es tan importante el cómo como el para qué, la herramienta como el mensaje. La tecnología es un instrumento y no un fin, y eso vale para cualquier tipo de plataforma. El periodismo web es una disciplina como el televisivo, radial o escrito y tiene sus propios lenguajes y códigos. En estos primeros años de medios digitales estamos en proceso de crecimiento y aún no estamos en madurez. Cuando esta madurez llegue será normal especializarse en periodismo web como ahora se hace en escrito, radial o de televisión.