La revancha personal de Salah: ¿Qué tanto cambió desde la lesión que lo sacó de la final ante el Real Madrid?

“Honestamente tengo que decir que en la final prefiero al Real Madrid”, pronunció Mohamed Salah con total convicción después de que Liverpool, su equipo, superara a Villarreal en las semifinales de la Champions League. El ansiado deseo del crack egipcio se cumplió al día siguiente de sus declaraciones: el club blanco se impuso en una dramática llave contra el Manchester City y clasificó a la final ante los ‘Reds’. Habiendo pasado ya cuatro años desde la disputa de la ‘Orejona’ entre ambos equipos en Kiev, ‘Mo’ decide no olvidar el difícil capítulo que vivió en la capital ucraniana para tener una revancha personal con los merengues en la magnífica París, que ya aguarda por él.

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Jürgen Klopp, que entrena y respalda a Salah desde hace cinco años, no cree en la venganza más allá de todos los condimentos que rodearon aquella final del 2017/18. “No creo que sea lo correcto”, afirma. Pero el estratega alemán no puede controlar las mentes de su jugadores, que son ampliamente diferentes a él, no solo en edad, sino también analítica y emocionalmente.

Es por ello que los focos, ahora, apuntan a Mohamed Salah. ¿Y cómo no? Una lesión en el hombro, provocada por Sergio Ramos, lo sacó del campo, desconsolado, en apenas 30 minutos de esa recordada final. Lo que vino después fue una dolorosa derrota para su equipo por 3-1 en la capital ucraniana, donde Real Madrid alzó su última ‘Orejona’.

Preguntado por ese momento, ‘Mo’ evidenció que la herida sigue abierta y pretende cerrarla definitivamente este sábado. “Recuerdo cuando salí del campo después de 30 minutos, fue el peor momento de mi carrera. Estaba realmente deprimido. Hice una buena temporada y luego jugar mi primera final de Champions y salir tan pronto fue lo peor que me pudo pasar”, rememoró el crack egipcio en la previa de la final en París.

¿Qué tanto cambió?

Como lo dijo el mismo Salah, en la campaña 2017/18 -justamente en la que empezó su aventura con el Liverpool- tuvo un rendimiento bastante óptimo a nivel individual. De hecho, fue la temporada de mayor prosperidad en toda su carrera. El egipcio formó un tridente fenomenal con Sadio Mané y Roberto Firmino, siendo el que mejores registros obtuvo de los tres.

Contando todas las competiciones, Salah anotó 44 goles y dio 16 asistencias en 52 partidos disputados esa campaña. Números excepcionales. Fue el goleador de la Premier League con 32 goles en 36 encuentros (0.89 de promedio) y fue el segundo máximo anotador de la Champions con 10 goles en 13 cotejos (0.77 de promedio), solo por debajo de Cristiano Ronaldo, que anotó cinco goles más en la misma cantidad de partidos.

Para él era su primera final y llegar hasta ahí no fue nada fácil. Liverpool tuvo que trazar su glorioso camino en el 2017/18 desde la tercera fase previa del torneo con el egipcio como su paladín. Teniendo éxito en todas las rondas, ‘Mo’ soñaba con ganar la Champions League ese año, pero la lesión en el hombro en Kiev le impidió ayudar a su equipo a arrebatarle el título al Real Madrid.

Después de ese día, las cosas no cambiaron mucho para Mohamed Salah. El crack de los ‘Reds’ siguió marcando goles por doquier, consiguiendo otras dos botas de oro inglesas, la del 2018/19 (22 goles) y la actual del 2021/22 que compartió con Son Heung-Min (23 goles).

Pero no solo eso. A nivel de títulos, el delantero egipcio conquistó el más importante de su carrera al año siguiente de perderla ante el Real Madrid: la Champions League. En el 2018/ 19, Liverpool superó en la final al Tottenham (2-0) con la firma de ‘Mo’ en uno de los goles.

Los trofeos de la Supercopa de la Europa 2019 y el Mundial de Clubes 2019 también brillan en el palmarés del jugador, además de los galardones en la Premier League 2019/20 y la Copa de la Liga y la FA Cup conseguidos en la presente temporada en el ámbito local.

No cabe duda de que Salah ha mantenido su rendimiento en lo más alto todo este tiempo que ha pasado. Claro está que no ha vuelto a repetir una producción goleadora como la del 2017/18, pero actualmente pocos pueden refutar que es el mejor del mundo en su posición.

No por casualidad, su nombre ha figurado sin cesar en las nóminas del Balón de Oro, aunque todavía no ha logrado subirse al podio de este galardón. Hoy por hoy, tiene esa gran oportunidad para conseguirlo. Siendo líder del Liverpool en la final ante el Madrid, el egipcio intentará demostrar que merece el máximo premio individual sobre Karim Benzema, que se ha ganado la ‘chapa’ de favorito hasta el momento. Ese duelo será aparte.

El enorme desgaste de la temporada

Es impresionante la gran exigencia física que ha tenido Mohamed Salah en este 2021/22. De acuerdo a un informe de FIFPro, el crack egipcio es uno de los que mayor desgaste ha tenido durante la temporada entre los protagonistas de la final del sábado.

Según los datos del colectivo de futbolistas, el extremo del Liverpool ha disputado 69 partidos a lo largo de la campaña -55 con los ‘Reds’ y 14 con su selección- teniendo un descanso menor a cinco días en el 55% del total de encuentros. A París, ‘Mo’ llegará bastante exigido con alrededor de 5.968 minutos de juego en sus chimpunes.

Comparando con sus otros compañeros analizados en el estudio, Salah ha jugado la misma cantidad de encuentros que Mané y ocho más que Virgil van Dijk. Eso sí, el atacante senegalés ha acumulado 5.368 minutos jugados en la temporada, mientras que el central neerlandés ha sumado 5.807 minutos, ambos menos que el egipcio.

Ahora bien, ningún jugador de la plantilla madridista se acerca a la exigencia que los futbolistas del Liverpool han tenido antes de la final. Vinicius Junior, el que más actividad ha tenido del plantel merengue, ha jugado 59 partidos (10 menos que Salah) con 5.011 minutos acumulados.

Por su parte, Karim Benzema -el protagonista del duelo aparte con ‘Mo’- ha disputado 52 encuentros durante la campaña, en los que ha sumado 4.591 minutos. El francés llegará más descansado que el egipcio en ese sentido, algo que puede aprovechar perfectamente en el campo. Aunque claro está que el francés tiene cinco años más encima que Salah, por lo que por ahí también pasa la gran diferencia en sus exigencias.