
Taylor Swift está de nuevo en el centro de atención, pero esta vez no por su música. La cantante le está dando a su mansión de Rhode Island una millonaria renovación, con la esperanza de que esta sea su residencia familiar principal con su novio Travis Kelce.
Según informó The Providence Journal, la cantante de The Last Great American Dynasty está poniendo 1,7 millones de dólares en una gran remodelación de su mansión de 17 millones en Watch Hill, según los permisos de construcción y los documentos de zonificación.
El lujoso palacio de Taylor Swift, conocido por sus fiestas llenas de celebridades cada 4 de julio, está a punto de someterse a una remodelación completa.
Entre los planes, se incluye una ampliación de 400 pies cuadrados que convertirá parte de su enorme casa de 11.000 pies cuadrados en una suite con un dormitorio y salón mucho más lujosos.

Pero la renovación no se queda solo ahí: la cantante de Cardigan también está reformando la cocina y añadiendo otro dormitorio a la casa principal.
Los permisos para la reforma se solicitaron de forma discreta a finales de noviembre y principios de diciembre de 2024, y la construcción podría extenderse hasta diciembre de 2025.
El permiso de construcción se aprobó oficialmente el 13 de enero, según los registros que consiguió The New York Post, pero con una aclaración: “El trabajo no podrá seguir hasta que el inspector apruebe las diferentes etapas de la obra”.
“Esta será su base principal y donde ella y Kelce esperan formar una familia algún día”, dijo al citado medio una fuente cercana a la cantante.

La mansión, que ocupa más de 5 acres de jardines bien cuidados, cuenta con un gran patio, una casa de piscina y un tramo privado de 700 pies de playa, y ha sido durante mucho tiempo el lugar de escape favorito de Taylor Swift.
Taylor Swift compró la propiedad de ocho habitaciones y diez baños en 2013, cuando solo tenía 23 años, y pagó los 17,75 millones de dólares de inmediato, con una transferencia bancaria rápida (sin juego de palabras).












