En diciembre de 2032 el asteroide 2024 YR4 se aproximará a la Tierra. La probabilidad de impacto hasta ahora es de 2.4%. (Foto: iStock / Pavel_Chag)
En diciembre de 2032 el asteroide 2024 YR4 se aproximará a la Tierra. La probabilidad de impacto hasta ahora es de 2.4%. (Foto: iStock / Pavel_Chag)

La ciencia ficción lo ha anticipado varias veces: la amenaza de un asteroide gigante. ¿Es el momento de empezar la cuenta regresiva? En diciembre de 2032 una roca gigante del espacio se acercará peligrosamente a la Tierra. Se trata del asteroide 2024 YR4, el cual fue descubierto el 27 de diciembre pasado por el programa ATLAS, acrónimo de Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides, desde Chile.

2024 YR4 mide entre 40 y 100 metros (130 y 330 pies) de diámetro. El sábado 8 de febrero, la NASA anunció que los cálculos estimaban que la posibilidad de impacto del asteroide con la Tierra en 2032 aumentaron a 2.4%. En la escala de Turín, la cual llega hasta 10 para impactos catastróficos, el asteroide tiene una calificación de 3 con una probabilidad de 1 en 43 de impactar la Tierra.

Simulación de las órbitas de la Tierra y el asteroide 2024 YR4. (Foto: The Sky Live)
Simulación de las órbitas de la Tierra y el asteroide 2024 YR4. (Foto: The Sky Live)

2024 YR4 pone a prueba la defensa planetaria

Durante años, la NASA y otras agencias han trabajado estrategias de defensa planetaria en caso algún asteroide de gran tamaño se acerque a la Tierra. El descubrimiento de 2024 YR4 ha provocado que se active el protocolo de defensa planetaria de las Naciones Unidas.

Como primer paso, todos los telescopios disponibles tienen que recopilar datos sobre el objeto espacial.

En este momento, el asteroide se está alejando de la Tierra mientras orbita alrededor del Sol, un viaje que dura cuatro años. Cada día que pasa se hace más difícil observarlo con los telescopios ubicados en la superficie terrestre. Se espera que en marzo solo 4 tengan la capacidad de seguirle el rastro y para abril solo el Very Large Telescope de Chile y el Gran Telescopio de Canarias podrán hacerlo. En mayo, solo el Telescopio Espacial James Webb que orbita la Tierra podrá darle un último vistazo. Se espera que en estas observaciones los astrónomos puedan completamente descartar un potencial impacto de 2024 YR4. De no lograrse, deberá esperarse hasta 2028 cuando el asteroide haya completado la órbita y nuevamente esté en el vecindario terrestre.

El Telescopio Espacial James Webb será el último que podrá seguir el rastro del asteroide 2024 YR4. (Foto: NASA/ESA/CSA)
El Telescopio Espacial James Webb será el último que podrá seguir el rastro del asteroide 2024 YR4. (Foto: NASA/ESA/CSA)

A la fecha, el International Astronomical Union’s Minor Planet Center ha recibido más de 300 observaciones de este asteroide de telescopios en todo el mundo lo que ha permitido ubicarlo en el firmamento. Tanto la NASA como ESA han estimado que su máxima aproximación a la Tierra ocurrirá en diciembre de 2032.

Qué pasaría si se determina que 2024 YR4 impactará a la Tierra

Incluso si los cálculos determinan que el asteroide impactará en la Tierra en diciembre de 2032, existe más de un escenario posible. A la fecha se calcula que el asteroide mide entre 40 y 100 metros. Sin embargo, su tamaño real todavía es incierto. En caso sea menor a los 50 metros y el impacto a la Tierra sea inminente, una estrategia probable, de acuerdo con Juan Luis Cano, coordinador del Servicio de Información de la Oficina de Defensa Planetaria de ESA, sería dejar que el asteroide se estrelle y evacuar a la población si es necesario.

Otro factor que todavía se desconoce, pero es importante es el ángulo. Si ocurre un impacto, los cálculos indican que podría ocurrir en el Océano Pacífico oriental, en el norte de América del Sur (Ecuador, Venezuela y Colombia), el Océano Atlántico, Golfo de Guinea en África y Mar Arábigo y el sur de Asia. Si bien algunas zonas de su probable paso está habitado, la mayor parte es mar.

Paolo Martino, jefe de las misiones de defensa planetaria de ESA, reconoció los desafíos técnicos que el asteroide representa debido a lo difícil que es predecir su órbita. “Ahora mismo, miles de astrofísicos de todo el mundo están trabajando en esto”, indicó en entrevista con . Ante la posibilidad de lanzar una misión de desviación, Martino sostuvo que es muy complicado. Para hacerlo, la , que logró cambiar la trayectoria de un asteroide en 2022 sería la única experiencia previa. Sin embargo, hay que recordar que las probabilidades de no impacto son del 97.6%.

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