En un caso que ha generado un intenso debate sobre la libertad de expresión y la política migratoria en Estados Unidos, Yunseo Chung, una estudiante de 21 años de la Universidad de Columbia, enfrenta una orden de deportación después de participar en protestas pro-palestinas en su campus. La joven, residente permanente legal y estudiante de tercer año, ha demandado al gobierno del presidente Donald Trump, alegando que su situación es un claro ejemplo de represalias por ejercer su derecho constitucional a la libertad de expresión.
Yunseo Chung: un intento de detención sin precedentes
La administración de Trump ha argumentado que la presencia de Chung en Estados Unidos obstaculiza su política exterior contra el antisemitismo. En ese contexto, funcionarios federales intentaron arrestarla en múltiples ocasiones, incluso registrando su residencia universitaria el pasado 13 de marzo. La demanda presentada por la estudiante detalla los extensos esfuerzos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para capturarla, incluyendo visitas a varias direcciones y la solicitud de ayuda a fiscales federales.
El caso de Chung, nacida en Corea del Sur, se asemeja al de Mahmoud Khalil, un graduado de Columbia y también residente permanente legal, quien fue arrestado y actualmente está detenido en Luisiana bajo acusaciones similares. A diferencia de Khalil, la joven no era una figura destacada en las manifestaciones del año pasado, pero sí participó en una protesta en Barnard College, lo que derivó en su arresto por la Policía de Nueva York (NYPD).
Investigación federal sobre la Universidad de Columbia
Uno de los aspectos más llamativos del caso es que las autoridades utilizaron una ley penal conocida como “estatuto de encubrimiento” para justificar las redadas en dos residencias dentro del campus de Columbia. Esto sugiere una posible investigación federal más amplia sobre la universidad y su relación con los estudiantes involucrados en protestas pro-palestinas.
El fiscal general adjunto, Todd Blanche, declaró que Columbia está bajo investigación por supuestamente “albergar y ocultar a inmigrantes ilegales en su campus”. ICE, por su parte, defendió sus acciones argumentando que investigan a “individuos involucrados en actividades de apoyo a Hamás, una organización terrorista extranjera”.
La defensa de Chung y el fallo a su favor
Ante la amenaza de deportación, los abogados de Chung presentaron una demanda federal en Manhattan exigiendo que el gobierno no la detenga ni la expulse del país. En su argumentación, denunciaron un “abuso de poder impactante” por parte de la administración de Trump y compararon el caso con la era del macartismo.
“No puede ser que una estudiante con calificaciones sobresalientes, que ha vivido aquí la mayor parte de su vida, pueda ser arrestada y potencialmente deportada solo por atreverse a hablar”, declaró su abogada Naz Ahmad, codirectora del grupo de asistencia legal CLEAR.
Finalmente, el martes, la jueza federal Naomi Reice Buchwald dictaminó que Chung no puede ser detenida mientras lucha contra su orden de deportación. La magistrada señaló que el gobierno no presentó pruebas suficientes para justificar su acción y emitió una orden de restricción temporal contra ICE.
Un caso con implicaciones políticas y legales
El caso de Yunseo Chung es solo un ejemplo de la creciente represión contra manifestantes pro-palestinos en Estados Unidos, especialmente aquellos con estatus migratorio en proceso. La administración de Trump ha buscado activamente la deportación de otros estudiantes en situaciones similares, como Momodou Taal, un estudiante de doctorado en la Universidad de Cornell, y Ranjani Srinivasan, quien abandonó el país tras la revocación de su visa estudiantil.
El futuro de Chung aún es incierto, pero su caso ha reabierto el debate sobre la relación entre la política migratoria y el derecho a la protesta en Estados Unidos. Mientras tanto, sus abogados continúan la batalla legal para evitar que sea deportada, en lo que podría convertirse en un precedente clave para la defensa de los derechos de los inmigrantes en el país.
Yunseo Chung, una estudiante de 21 años de la Universidad de Columbia, enfrenta una orden de deportación después de participar en protestas pro-palestinas en su campus
