Redacción EC

El Reino Unido se ha convertido en el tercer país con más muertes a causa del , según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recogidos por la página Worldometers. Los 26.771 decesos en territorio británico solo son superados por Italia (27.967) y Estados Unidos (63.287). Y la situación ha puesto en el centro del problema, como actor principal, al primer ministro .

Pese a que los dos primeros casos se registraron el 31 de enero, una familia china que se hospedaba en un hotel de la ciudad de York, hasta el 19 de marzo el Gobierno de Johnson no había decretado una cuarentena, cerrado fronteras ni realizado test sistemáticos en la población.

Todo ello pese a que una semana antes había reconocido que la pandemia era “la peor crisis de salud pública en una generación”.

Por esos días ya se registraban 3.229 casos confirmados y 144 muertos a causa del COVID-19 en el Reino Unido, aunque el principal consejero científico del gobierno consideraba “razonable” pensar que en realidad unas 55.000 personas portaban el virus.

Es más, hasta poco días antes, el 3 de marzo, el primer ministro conservador, de 55 años, se jactaba de “estrechar la mano a todo el mundo” luego de visitar un hospital donde atendían a pacientes de COVID-19.

El 3 de marzo, el primer ministro conservador, de 55 años, se jactaba de “estrechar la mano a todo el mundo” luego de visitar un hospital donde atendían a pacientes de COVID-19. (Foto: Frank Augstein / AFP)
El 3 de marzo, el primer ministro conservador, de 55 años, se jactaba de “estrechar la mano a todo el mundo” luego de visitar un hospital donde atendían a pacientes de COVID-19. (Foto: Frank Augstein / AFP)
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Recién el 20 de marzo se hizo efectivo el cierre de escuelas, bares, restaurantes y otros establecimientos de ocio para incrementar el distanciamiento social que habían recomendado las autoridades pocos días atrás luego de que un estudio científico alertara que, de seguir en el mismo camino, podrían haber hasta 250 mil muertes a causa del coronavirus.

El 23 de marzo, Johnson se dirigió al país para ordenar un confinamiento de tres semanas. Cuatro días más tarde, el primer ministro sorprendía anunciando que había dado positivo a los exámenes de COVID-19.

Esa semana transcurrió entre consejos de ministros virtuales, videos de Johnson en los que aseguraba estar bien pese a su deteriorado semblante y salidas a la puerta de la residencia en el número 10 de Downing Street para aplaudir al personal médico.

La semana del 23 de marzo transcurrió entre consejos de ministros virtuales, videos de Johnson en los que aseguraba estar bien pese a su deteriorado semblante y salidas a la puerta de la residencia en el número 10 de Downing Street para aplaudir al personal médico. (Foto: Andrew Parsons / 10 Downing Street / AFP)
La semana del 23 de marzo transcurrió entre consejos de ministros virtuales, videos de Johnson en los que aseguraba estar bien pese a su deteriorado semblante y salidas a la puerta de la residencia en el número 10 de Downing Street para aplaudir al personal médico. (Foto: Andrew Parsons / 10 Downing Street / AFP)
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El domingo siguiente, 5 de abril, mientras la reina Isabel II terminaba el excepcional discurso televisado instando a los británicos a resistir, agencias internacionales alertaban que Johnson estaba siendo hospitalizado “como medida de precaución” por los persistentes síntomas que sufría.

Al día siguiente, el jefe de gobierno era ingresado a la Unidad de Cuidados Intensivos, donde permaneció por tres días. Por esos días el Reino Unido batía el doloroso récord de 938 muertos en 24 horas.

Para el 12 de abril, Johnson era dado de alta.

Cronología del contagio que sufrió Johnson de COVID-19 y causó que sea internado en la Unidad de Cuidados Intensivos. (AFP)
Cronología del contagio que sufrió Johnson de COVID-19 y causó que sea internado en la Unidad de Cuidados Intensivos. (AFP)

Durante su internamiento, el ministro de Relaciones Exteriores Dominic Raab estuvo al frente del timonel británico. En este tiempo, además, el gabinete de Johnson se ha visto fragmentado entre los que apoyan al ministro de Salud, Matt Hancock, en su intención de mantener las medidas de aislamiento y el de Economía, Rishi Sunak, quien aboga por un acelerado regreso de las actividades laborales.

Y aunque todo parecía prever que Johnson regresaría con la intención de priorizar la salud y fortalecer los centros de atención sanitarios -a los que agradeció por “haberle salvado la vida” en medio de una ola de reclamos por falta de equipamiento médico-, en su primera rueda de prensa brindada este jueves aseguró que el Reino Unido ya había pasado el pico máximo de la pandemia.

Además, el primer ministro adelantó que la próxima semana tendrían una hoja de ruta para la desescalada en las medidas de aislamiento. Todo esto pese a que el Reino Unido acaba de registrar 674 nuevas muertes por el COVID-19.

Hemos superado lo que podría haber sido un vasto pico, como si hubiéramos estado pasando por un enorme túnel alpino, y ahora podemos ver la luz del sol”, dijo Johnson.

Especialistas en la salud tanto británicos como alrededor del mundo han advertido que un levantamiento precipitado del confinamiento social en los países podría generar una segunda ola de contagios, que llegaría a ser incluso más dramática que la primera.

Ante ello, Johnson pareció más cauto al señalar que “es vital que no perdamos el control y nos apresuremos a una segunda montaña aún más alta”.

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¿Qué es el coronavirus?

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), los coronavirus son una amplia familia de virus que pueden causar diferentes afecciones, desde el resfriado común hasta enfermedades más graves, como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS-CoV).

El coronavirus descubierto recientemente causa la enfermedad infecciosa por coronavirus COVID-19. Ambos fueron detectados luego del brote que se dio en Wuhan (China) en diciembre de 2019.

El cansancio, la fiebre y la tos seca son los síntomas más comunes de la COVID-19; sin embargo, algunos pacientes pueden presentar congestión nasal, dolores, rinorrea, dolor de garganta o diarrea.

Aunque la mayoría de los pacientes (alrededor del 80%) se recupera de la enfermedad sin necesidad de realizar ningún tratamiento especial, alrededor de una de cada seis personas que contraen la COVID-19 desarrolla una afección grave y presenta dificultad para respirar.

Para protegerse y evitar la propagación de la enfermedad, la OMS recomienda lavarse las manos con agua y jabón o utilizando un desinfectante a base de alcohol que mata los virus que pueden haber en las manos. Además, se debe mantener una distancia mínima de un metro frente a cualquier persona que estornude o tose, pues si se está demasiado cerca, se puede respirar las gotículas que albergan el virus de la COVID-19.

¿Cuánto tiempo sobrevive el coronavirus en una superficie?

Aún no se sabe con exactitud cuánto tiempo sobrevive este nuevo virus en una superficie, pero parece comportarse como otros coronavirus.

Estudios indican que pueden subsistir desde unas pocas horas hasta varios días. El tiempo puede variar en función de las condiciones (tipo de superficie, la temperatura o la humedad del ambiente).

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