Don Salazar, la cafetería que busca acercar el café peruano a todos los usuarios

Según la Junta Nacional de Café, el consumo de café peruano al año es de 900 gramos per cápita, un número que ha crecido en 2022, pero que no es suficiente. Precisamente, el deseo de aumentar esa cifra ha sido la motivación de Arturo Marín Salazar, quien nació en una familia de productores cafetaleros y que hoy, con Don Salazar, empieza a ver su sueño materializado: el de llevar el café peruano a todos los peruanos.

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Arturo creció en una finca de café en Villa Rica, su familia es productora desde siempre, pero tras el fallecimiento de su abuelo y luego de su padre, las cosas cambiaron, a esto se le sumó una plaga que acabó con todo y no fue hasta el 2017 que decide retomar el negocio de la familia en el sector que le fue heredado y así empezó su aventura: Don Salazar, la marca que nació dos años después, justo cuando empezó a cosechar.

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“Lanzo Don Salazar con la primera producción que tuvo la finca en 2019, pero lamentablemente vino la pandemia y fue un golpe bien duro porque recién me había lanzado a emprender”, cuenta Arturo, quien tuvo que darle un giro a su negocio cuando a penas comenzaba. La idea de vender café se mantuvo solo que lo hizo a través de la idea de hacer tu propio café de especialidad en casa de manera fácil y rápida.

“Entonces hice un kit que tenía unos 15 filtros y una jarrita que te daba la cantidad exacta de agua que se necesitaba y el filtro te daba la cantidad exacta de café, entonces no te preocupabas por cuánto café ponerle, ni cuánta agua, todo estaba listo. Cualquier persona podía hacer un café de especialidad como si fuera un barista”, dice Arturo. Efectivamente, la venta de este kit despegó, toda su comunicación fue por Instagram y las ventas fueron un éxito.

Don Salazar empezaba a cumplir el propósito con el que nació: que en el Perú se consuma café peruano de manera fácil, rápida, práctica y divertida para que lo hagan todos. “Así fue creciendo la marca, empecé a despachar desde mi casa y después fuimos expandiéndonos, alquilé un pequeño espacio para armar una oficina y un mini planta de producción en San Miguel y así poco a poco se fueron dando las cosas”.

La cafetería de Don Salazar

La venta digital empezaba a caer porque la gente estaba saliendo otra vez y esto fue señal que era momento de un punto físico. “Me puse a buscar lugares donde podía poner todos los productos que ofrecemos, desde café hasta las cafeteras que suelen ser bastante innovadoras y luego de revisar mucha data, Larcomar nos convenció también porque teníamos el factor de los turistas, quienes toman mucho más café que los propios peruanos, así que era un lugar ideal para comenzar”.

En noviembre de 2022 se hace realidad este espacio que superó en 150% el estimado de ventas y esto les abrió varias puertas, pero al principio la idea solo era vender los productos y convertir el lugar en un “museo del café”, sin embargo, sabían que tenían que educar a los usuarios, así que decidieron dedicar un pequeño espacio para que lo prueben y empezaron a vender simples, expressos, cappuccinos y la gente empezó a consumirlo.

“A solo tres semanas de haber abierto, con el barista empezamos a pensar en algo helado que tenga un toque de acidez, porque queríamos ofrecer algo diferente a lo que se encuentra en las cafeterías comerciales, y pensamos en maracuyá y mango. Quedó buenísimo y pusimos a la venta el sparkling coffee, igual que los kits hice un TikTok en mi cuenta personal, se hizo viral y me acuerdo de que ese fin de semana triplicamos las ventas”. Hoy el 60% de la venta total es de tazas de café al paso.

El éxito los llevó a pensar en un punto más que se encuentra en Punto Orgánico, pero aún necesitaban más y empezaron a trabajar la cafetería en la Universidad del Pacífico, un espacio más amplio que les permitirá una afluencia mayor con una carta más grande y con la posibilidad de que los propios usuarios pueden preparar su propio café.

Para mediados de año se alistan a inaugurar una cafetería en otra universidad y dos puntos más en malls de Lima. Pero lo más próximo son las máquinas expendedoras de café especialidad que se irán colocando en diferentes universidades. .

La idea de Don Salazar es hacer el café accesible para todos y para ello están trabajando. “Queremos que tomar un café de especialidad sea fácil para que cualquiera se anime a probarlo, porque si pruebas un buen café, en verdad, ya no hay vuelta atrás”, asegura Arturo Marín Salazar.