La fama y el reconocimiento tienen efectos distintos en todos. Johanna San Miguel y Carlos Carlín no son una excepción y cada uno revela haber tenido diferentes experiencias. En #Dilo , los ex Patacláun recordaron sus inicios en las aclamadas telenovelas Carmín y Los de arriba y los de abajo, respectivamente. Johanna confiesa que, a sus 17 años de edad, el golpe de popularidad por la recordada telenovela de 1985 fue muy difícil de enfrentar.
Eran muy jóvenes cuando empezaron a trabajar en televisión. Johanna San Miguel cumplía el rol de ‘Andrea Aramburú’ en la telenovela Carmín. El éxito de la historia protagonizada por Patricia Pereyra y Roberto Moll tuvo un duro impacto en Johanna. “Yo no estaba preparada para eso. Un día en tu casa eres Johanna, sales a la calle y eres ‘Andrea’. Yo decía: ¿a quién están llamando? Casi me muero”, expresa.
El abrumador reconocimiento le produjo una fuerte confusión. Era 1985 y sus vulnerables 17 años la obligaron a retirarse de la producción. “Renuncié antes que termine la novela. Me pinté el pelo de negro, me lo corté chiquito para que nadie me reconozca y salí a la calle”, recuerda. La radical medida buscaba aliviarla de la exposición de la fama. Hasta el día de hoy, su personalidad tímida la hace evitar conglomeraciones. “A veces la gente puede pensar que eres sobrada y no tímida. Yo soy bastante tímida. Me da vergüenza”, aclara sin desvirtuar el agradecimiento que siente hacia el público.
Carlín, Los de arriba y los de abajo y cuando el reconocimiento se esfuma
En 1994, Carlos Carlín conseguía su primera participación en una telenovela. Los de arriba y los de abajo tenía como protagonistas a Óscar Carrillo y Mónica Sánchez. Para Carlín era un placer rodearse de amigos que había conocido en el teatro. “La gente nos saludaba y no lo podíamos creer. Sentimos un poquito la invasión, pero no es algo que me haya molestado (…) Para mí era divertido porque no me cobraban en la combi”, rememora con gracia. “Él habrá estado feliz de que todo el mundo se le tire encima”, replica sarcástica Johanna San Miguel. “Era otra época, cuando tú hiciste Carmín en Lima había 250 personas. Claro, fue un infierno”, bromea ‘Tony’.
Carlín recuerda que al término de Patacláun y, posteriormente, Carita de atún, decidió darse un espacio lejos de la televisión peruana. Luego de vivir un tiempo en España la reacción de la gente en las calles había cambiado. “Uno sí siente la ausencia, la carencia y la abstinencia cuando, de pronto, no te reconocen”, refiere.
“Un día estaba con Salvador Del Solar y Santiago Magill. Ellos eran muy populares por las novelas de América Televisión”, recuerda. La gente se emocionaba al cruzarse por la calle a los galanes de la época. “A ellos los saludaban y a mí me decían: ¿Me puedes tomar la foto?”, cuenta entre risas. “Yo decía: pero yo también salía en la televisión”, bromea.
Más allá de la broma, el protagonista de Papá YouTuber considera que emocionarse con el reconocimiento es inherente a los artistas. “Yo creo que aquel que diga que odia el reconocimiento, en este medio, es absolutamente falso. Que no te reconozcan te duele como el demonio”, sentencia.
En otro momento de la entrevista, Carlos Carlín intentó volver a caracterizar a ‘Tony’ de Patacláun, diciendo “cosita rica” y el resultado fue inesperado. La divertida dupla, además, emocionó al público al hablar de la gran amistad que los une. Por otro lado, Carlín se mostró bastante celoso cuando Johanna se refirió al reencuentro televisivo generado hace algunas semanas, con su ex compañero de Esto es Guerra, Mathías Brivio. Y en el juego Impro en ABC, Carlín representó a un actor que por primera vez haría de galán de telenovela. Ella, la insoportable y famosa actriz que sería su pareja en la ficción.