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Todas hemos escuchado historias de antojos en embarazadas. Algunos son tan comunes como helado, frutas, chocolate o tocino; pero algunas mujeres sufren de otros mucho más extraños como tierra o hasta pequeñas piedras.
Sea cual fuere el antojo, tres de cada cuatro embarazadas los tienen. Esto se debe a diversas causas, sin embargo los médicos han detectado cuatro fundamentales:
1. Deficiencia de alguna sustancia en tu organismo
Puede ser que necesites vitamina C y se te antoje comer muchas fresas, naranjas o cebiche (sí, hasta en la noche) o si te faltasen proteínas, de pronto quieras comer un rico asado de carne o un pescado frito en el desayuno.
2. Falta de afecto
De repente esos antojos de las embarazadas tengan una causa psicológica y se den únicamente por atraer la atención y el afecto de su pareja.
3. Cambios hormonales
Es posible que estos tengan mucho impacto en los sentidos del olfato y del gusto de las mujeres embarazadas. Así como habrá alimentos que constituyan antojos y le producirán mucho placer, habrá otros que rechacen sobremanera, incluso con solo verlo u olerlo.
4. Ansiedad por el futuro:
Es normal que las mujeres embarazadas tengan muchos nervios por cómo será su bebé, qué significará ser madre y los cambios que esto implica; por lo que intentarán disminuir la ansiedad propia de la gestación comiendo los alimentos "prohibidos" o antojos, aquellos que nos hacen engordar con una justificación: la llegada de nuestro hijo o hija.
Cuéntantos, ¿qué antojos has tenido cuando estabas embarazada?
