Isabella Jugo Escate

Según la Organización Panamericana de Salud, aumentará aproximadamente en un 60% durante las próximas dos décadas. Por ello, es fundamental estar al tanto de no solo a nivel físico, sino psicológicamente, pues es una enfermedad que puede dejar múltiples estragos en la salud mental de una persona.

“Desde el momento que un paciente recibe el diagnóstico del cáncer, cualquiera sea su gravedad se empieza a activar todo un proceso psicológico dentro del paciente. Asimismo, muchas de las principales áreas de su vida se ven enormemente afectadas, desde el plano laboral, social y, en ocasiones, económico, hasta el plano personal, íntimo y familiar. Asimismo, la enfermedad puede provocar cambios corporales importantes, que pueden afectar a la imagen corporal y, por ende, a la autoestima del paciente”, señaló Héctor Lazo, psicólogo de SANNA Clínica San Borja.

En ese sentido, conversamos con Maritza Parione, Presidenta de la Asociación Nacional de Psicooncología del Perú, quien nos recordó la importancia de la psicooncología. “Es una especialidad que se encarga de brindar a pacientes con cáncer. De este modo, busca ayudarlos a sobrellevar los efectos psicológicos de esta enfermedad”, sostuvo.

De acuerdo con la especialista, la palabra ‘cáncer’ implica una carga emocional para cualquier persona desde el primer instante del diagnóstico. Aunque sea dado con mucha sensibilidad, va a tener una repercusión intensa a nivel de todo lo que es ansiedad, pues será una situación llena de incertidumbre. “La persona va a experimentar una crisis que va a afectar todas las dimensiones de su vida. El apoyo de la psicooncología permite que estos pacientes puedan tener un acompañamiento para ir atravesando este camino tan difícil”, añadió.

¿Cuál es el impacto del cáncer en la autoimagen y la autoestima?

En primer lugar, Parione hizo mención de los cambios temporales que pueden darse en el paciente, como es el caso de la pérdida de cabello y otros efectos físicos de la quimioterapia. No obstante, también hay efectos permanentes, como los que son provocados por la cirugía radical de mama. “Se ha observado en estas pacientes múltiples cambios asociados con la satisfacción corporal y deterioro de la imagen física, pues afecta algo distintivo: su feminidad”, añadió.

Es muy relevante que el psicólogo que está formado y entrenado para el manejo de emociones.
Es muy relevante que el psicólogo que está formado y entrenado para el manejo de emociones.

Para combatir esta situación, el psicólogo Héctor Lazo recuerda trabajar con el paciente y brindarle psicoeducación. El paciente debe saber que el cáncer no siempre es terminal y que bajando su autoestima, también bajan las defensas para poder enfrentarlo”, enfatizó.

“El conocimiento por parte de los pacientes y de sus familiares de la trascendencia del daño biológico y las esperanzas que representan las intervenciones médicas para su curación, constituyen un primer paso para el trabajo psicoterapéutico que contribuya a una mejor adherencia al tratamiento”, aseveró Lazo.

¿Cuáles son los pilares para sobrellevar la situación?

La psicooncóloga Maritza Parione hizo hincapié en que cada persona va a vivir esta crisis a su ritmo. No obstante, desde el proceso del duelo, existen ciertos pilares que debemos tener en cuenta para apoyar al paciente a sobrellevar este largo camino:

  • El paciente no tiene por qué pasar esta experiencia sola: Las personas suelen cerrarse en su propia reflexión y las emociones que están viviendo, como la ansiedad. Tienden a creer que pueden encontrar una salida ellas mismas, pero no siempre tiene que ser así.
  • La necesidad del acompañamiento de un profesional: Es normal bloquearse por el estado de shock y no estar en la condición de encontrar una salida solo.
  • Comunicación con escucha activa: Las personas de su alrededor deben hacerle presente que las emociones que está viviendo son válidas.
  • Incluir a la familia: Tienen que tomar el rol de soporte principal para el paciente. “Estar ahí sin forzar, pues la persona también necesita tiempo y espacio para procesar lo que está sucediendo”, resaltó la psicóloga.
  • Crear alianzas: Lo mejor será que la familia y seres queridos realicen una alianza con los profesionales que están tratando al paciente, tanto los médicos como los psicólogos. De este modo, lograrán entender mejor su rol y los cambios que se van a dar a nivel conductual en el paciente.
  • No negar la realidad: La situación tiene que estar presente para que la situación sea llevadera.

¿Cómo impulsar la autoestima del paciente oncológico?

Lazo señala que se pueden brindar técnicas de psicoterapia donde el paciente pueda liberar emociones negativas y cambiar su actitud de forma positiva frente a la enfermedad. “El enfoque cognitivo conductual y la desensibilización sistemática pueden ayudar en el proceso de rehabilitación para enfrentar los cambios ineludibles que sufrirá el paciente y para cuando es necesario la ruptura o transformación de algunos hábitos”, especificó.

De la misma manera, indicó que puede emplearse la técnica de inoculación para aprender estrategias de afrontamiento más sanas, la solución de problemas y la expresión emocional.

De caso contrario, el experto mencionó que se pueden generar múltiples efectos negativos. “Si no se trata de la manera correcta, el paciente puede resistirse a seguir el tratamiento, y pasar a niveles más elevados de depresión”, recalcó.

Es por eso relevante el contar con psicólogos durante el proceso, pues él o ella centra su atención en el paciente, no en la enfermedad que lo aqueja, es decir, entiende al enfermo en su totalidad biopsicosocial. Entre sus acciones, no solo garantiza el cuidado psicoemocional, sino que también puede entrenar al personal de salud en el manejo de ciertos problemas psicológicos y en ofrecer el apoyo psicológico básico a los pacientes y familiares”, finalizó Héctor Lazo.