Aconsejando a amigos que viajan al Perú por primera vez
Mis amigos Jaouen y Laetitia (él belga y ella francesa) estaban planeando hacer un viaje a un destino “lejano” en el mes de mayo. Estaban considerando Vietnam o el Perú. Si bien su preferencia iba más hacia Vietnam, terminé convenciéndolos de que se animaran por nuestro país. Argumenté que como habían ido a las Filipinas el año pasado ya habían conocido Asia, así que por qué no conocer el país más emblemático de América Latina. Además, un pasaje ida y vuelta de Toulouse a Lima por menos de 700 euros es una ganga que hay que aprovechar. Les ayudé a armar un itinerario y a darles ciertos consejos para su primer viaje por nuestro país.
Como Laetitia quería un par de días de descanso con sol y playa, los quise orientar a hacer un viaje por el norte y el oriente (Iquitos, Tarapoto, Chachapoyas, Cajamarca, Trujillo, Chiclayo, Máncora y Huaraz), pero la notoriedad de las atracciones del sur de nuestro país terminó convenciéndolos de olvidarse de la playa y hacer la popular ‘ruta de los gringos’. Les recomendé que dejaran Lima para el final y que partieran a Paracas en cuanto llegaran. Como su vuelo aterrizaba a las 6 de la tarde, les aconsejé que esperaran hasta la madrugada siguiente para salir ya que me habían dicho que llegar a Pisco en el medio de la noche no era seguro. El trayecto de Lima a Paracas es de unas 3 horas. Una vez en Paracas les dije que hicieran una visita a las islas Ballestas y a la Reserva Nacional de Paracas para observar el contraste del desierto con el mar. Al terminar el paseo a media tarde debían tomar un bus hacia Nasca (4 – 5 horas), dormir allá y hacer una visita a las líneas de Nazca por la mañana seguido de una excursión al cementerio de momias.
De Nasca a Arequipa hay unas 8 horas en bus que pueden hacer partiendo en el medio de la tarde o durante la noche. En Arequipa pueden estar dos días para visitar la ciudad, el convento de Santa Catalina, el Molino de Sabandía y disfrutar de su exquisita gastronomía.
En la tarde del segundo día deben tomar un bus a Cabanaconde (6 horas) para pasar tres días conociendo el cañón y el valle del Colca. Volviendo a Chivay tienen la posibilidad de tomar un servicio de bus turístico directo a Puno (sale a las 13:30 y tarda 6 horas y media) que si bien es algo caro, les ahorrará por lo menos medio día al no tener que volver a Arequipa. (Les aconsejé de negociar el precio del bus, a nosotros nos dieron un buen descuento cuando lo hicimos el pasado agosto)
En Puno deberán dormir una noche en un hotel donde puedan dejar su equipaje un par de días y partir temprano hacia el pueblo de Capachica (2,5 horas) para ver su colorido mercado dominical. De Capachica irán al pueblo de Llachón, donde pueden dormir en albergues rurales en casa de los habitantes.
En Capachica tomarán un bote rumbo a la Isla de Amantani (1 hora) donde también pueden dormir en un albergue rural y hacer bellas caminatas con vista al lago Titicaca.
El bote rumbo a Puno pasa por las islas de los Uros. Aunque son pintorescas, muchos turistas suelen quejarse de su ambiente artificial.
Al volver a Puno deberán negociar con un taxi la ida y vuelta hasta Sillustani para ver las chullpas y su paisaje impresionante con la luz del atardecer.
Si tienen tiempo podrían ir un día al pueblo de Juli y visitar sus bellas iglesias barrocas.
Luego deberán tomar un bus al Cusco (5 a 6 horas). Ahí les sugerí pasar el primer día descubriendo la ciudad y planeando la logística para ir a Machu Picchu, de lo que depende el resto de los días. En Cusco les recomendé quedarse en la zona de San Blas, pero de la calle de los Siete Angelitos para arriba, donde los hoteles cuestan considerablemente menos que en la calle Choquechaca.
Aconsejarles cómo llegar a Machu Picchu minimizando el costo y las complicaciones fue particularmente largo. Primero les aconsejé evitar los tours ya que estos suelen ser o muy caros o una estafa. En mi último viaje al Perú el año pasado fui testigo en mi hotel de cómo una pareja de viajeros era insultada por el representante de una compañía de turismo por el simple hecho de exigir un reembolso debido a que no les dieron los billetes de tren que les prometieron. Desgraciadamente historias como estas abundan y lo mejor es organizarse uno directamente la visita y evitar intermediarios.
El primer paso es averiguar la disponibilidad de los pasajes de tren más baratos desde Ollantaytambo a Aguas Calientes, que a un precio de entre $54 y $114 (ida) para recorrer una distancia de 40 km en una hora y media no son ninguna ganga. Como punto de comparación, viajar en tren de Toulouse a París cuesta exactamente eso pero para cubrir 700 km en 6 horas. Antes de comprar el pasaje de tren ir al sitio web de Machu Picchu, donde se puede generar el código de reserva para las entradas a Machu Picchu y así asegurarse que haya cupo para el día deseado. Armados del número de reserva, deben ir al instituto Peruano de Cultura en la Avenida la Cultura para pagar y recibir su ticket. Por el momento no se puede pagar por Internet con tarjeta extranjera y prefiero enviarlos al INC que al Banco de la Nación. Una vez confirmada la entrada para Machu Picchu deberán reservar un pasaje en tren para tarde anterior desde Ollantaytambo, lo cual les permitirá dormir allá y levantarse temprano para disfrutar de Machu Picchu en el amanecer. Para esto les recomendé levantarse a las 4 de la mañana y subir a Machu Picchu a pie (1,5 horas) ahorrándose el precio exorbitante del bus. Para el regreso les recomendé o que reserven un pasaje en un tren al final de la tarde para Ollantaytambo o que caminen de Aguas Calientes a Santa Teresa para luego volver al Cusco vía Santa María en bus (la llamada ruta alternativa), ahorrándoles otro pasaje en tren.
Una vez arreglada la logística para la visita de Machu Picchu les recomendé partir a Chincheros en combi temprano en la mañana. Después de visitar el pueblo, les dije que debían ir hasta Maras también en colectivo para visitar sus lindas iglesias y luego hacer la caminata hacia Moray y a las impresionantes salineras, desde donde pueden bajar a pie hasta el valle del Urubamba y agarrar un transporte hacia Pisac, donde pueden dormir.
En Pisac deberán subir temprano a los restos arqueológicos antes de que lleguen las multitudes de turistas y luego bajar a pie y visitar su famoso mercado.
Les había hablado tanto de Choquequirao que también lo quieren hacer. Les recomendé tomar un bus rumbo a Abancay y bajarse en el cruce de Cachora, (3 horas) donde pueden también visitar el Santuario de Saywite. Desde ahí deberán negociar el transporte valle abajo hasta el pintoresco pueblo de Cachora, donde dormirán y deberán encontrar un arriero y una mula para hacer la caminata de cuatro días ida y vuelta hasta los espectaculares restos bajando hasta el fondo del cañón del río Apurímac. Les escribí en español las instrucciones y los precios que deberían dar a los arrieros para la excursión.
Después de volver al Cusco, y si el tiempo lo permite, podrían ir a un lodge amazónico en las cercanías de Puerto Maldonado, donde podrán conocer la selva de una manera un poco más relajada y descansar de los rigores de la caminata a Choquequirao. Les advertí sobre la política que tienen algunas compañías aéreas de cobrar un precio mayor a los turistas extranjeros y les indiqué cuales deberían usar para evitar pagar esos precios.
Terminarán su viaje con dos días en Lima, donde podrán visitar el Centro Histórico, los museos y disfrutar de nuestra gastronomía. Última recomendación antes de llegar a Lima: pagar por adelantado a la compañía de taxis y no pagar más de 40 soles para ir a Miraflores. Me acaban de escribir y ya están en Paracas. Espero que la pasen lindo y que quieran regresar.
Me interesa mucho sus opiniones. ¿Qué les parece el itinerario aconsejado? ¿Le darían alguna otra sugerencia a mis amigos? ¿Algunos de ustedes ya han ayudado a otras personas a organizar un viaje por nuestro país? ¿Qué sugerencias o ideas tendrían para mejorar la experiencia del turista en el Perú? Les agradezco de antemano sus opiniones.