Sin cabeza ni futuro
Y algún día tenía que suceder: Juan Reynoso anunció que su estancia en Universitario tiene plazo fijo. Los problemas económicos derivados de la inestabilidad dirigencial provocaron que el ‘Cabezón’ diga hasta acá nomás y señale este viernes como fin del ciclo que iniciara el año pasado con la crema. Aunque existe la posibilidad de que dirija ante Cienciano, es evidente que ya se cansó. Y, según ha trascendido, no se iría solo.Rainer Torres, Piero Alva y Carlos Galván serían los jugadores que dejarían el club junto con Reynoso y no se descarta que Fito Espinoza y Víctor Píriz Alves, la pareja que trajo, les sigan los pasos.
Quebrada, sin posibilidad de obtener dinero fresco de alguna entidad financiera o de vender a jugadores porque su directiva no está inscrita en Registros Públicos, la ‘U’ necesita medio millón de dólares para pagar los dos meses de sueldo que le debe a sus jugadores (sin olvidar la deuda con admnistrativos, obreros, hoteles, agremiación, etc.). La esperanza de los dirigentes es conseguir dinero para pagar un mes o parte de él y con ello tratar de convencer a Reynoso de que las cosas pueden cambiar. Pero hay un pequeño inconveniente: Mientras la directiva de Jaime León estaría esperanzada en conseguir la inscripción en Registros Públicos este viernes y con ello conseguir el aval legal que le permita trabajar con tranquilidad (existe la versión de que un auspiciador estaría dispuesto a adelantarle dinero correspondiente a la campaña del 2011), la Junta Transitoria pretende obtener ese mismo día la revocatoria de la medida cautelar que la dejó sin piso y retomar la administración del club. Es decir, el enredo legal continúa.
La oposición ha soltado la versión de que la renuncia de Reynoso no es sincera y que en realidad lo que hay detrás es un plan para forzar la amenaza de una situación límite -la salida del cuerpo técnico y los jugadores- que le cierre el paso a la Junta Transitoria.
Más allá de que esta posibilidad sea cierta, ¿es posible trabajar con tranquilidad en estas condiciones?
Respeto las opiniones de todos, pero creo que se equivocan quienes tratan de minimizar la situación del club o señalan que en este blog deberíamos preocuparnos más por lo deportivo que lo institucional. La ‘U’ se está cayendo a pedazos y lo que se están disputando las facciones que encabezan León y Guinea es lo poco que está quedando de ella. Si no hay una solución radical a corto plazo, lo que se viene puede ser peor a lo vivido luego del Apertura del 2002, cuando tras el título obtenido con Ángel Cappa el grueso del plantel se fue y hubo que afrontar el Clausura con un equipo integrado por suplentes y juveniles.
¿Qué propongo? Que oficialismo y oposición se sienten en una mesa y por unas horas tengan en cuenta que la ‘U’ que tanto quieren se encuentra en una situación terminal. Y que de ese diálogo surja la mejor solución, no para sus intereses, sino en favor del club. El campeón requiere dinero fresco para afrontar esta coyuntura y un plan sostenible para fortalecer sus bases institucionales. Quien cumpla con ambos requisitos que tome las riendas y punto final. Sé que es simple decirlo y escribirlo, pero no encuentro otra alternativa frente a la urgencia que vivimos. Hagámoslo ahora antes de que sea demasiado tarde.