Se empieza a usar en el Perú la radiocirugía
Pese a que se trata de una tecnología que ya lleva varios años en uso, recién desde el último 31 de agosto se realiza en Lima un novedoso tratamiento para destruir o dejar inactivas lesiones cerebrales. Se trata de la radiocirugía, un tratamiento no invasivo basado en radiaciones ionizantes, que consiste en administrar de manera muy precisa al paciente que sufra de tumores, malformaciones vasculares u otras patologías, altas dosis de radiación en una sola sesión. Sepa más sobre esta nueva alternativa y vea algunos videos.
Hasta la Clínica Ricardo Palma ha llegado el neurocirujano argentino, Jorge Manolesi, para adiestrar a los galenos locales en el uso de esta herramienta.
¿Qué de nuevo tiene esta terapia? Bueno, resulta que es una de las tantas herramientas (quimioterapia, radioterapia, operaciones quirúrgicas, etc) con las que cuentan los oncólogos para tratar tumores. En líneas generales se basa en lo mismo que la radio terapia, pero con una fundamental diferencia. Mientras que en la radioterapia el paciente es sometido a ella, en sesiones muy constantes, durante un mes o más tiempo, en el caso de la radiocirugía se aplica una mayor dosis de radiación sobre una zona específica y en una única sesión.
Manolesi me recuerda que el rayo de radiación directamente no es el que cura, sino que motiva un comportamiento beneficioso. “Los rayos sobre la lesión generan una serie de reacciones químicas sobre las células anormales, que provocan la ruptura de su material genético con lo cual cuando se quieran dividir para proliferar no lo podrán hacer. Eso lleva un tiempo y depende del tipo de lesión que se esté tratando”, subraya.
CUIDADOSA PREPARACIÓN
Sin embargo, para obtener buenos resultados es imprescindible un proceso de planificación muy cuidadoso. El Blog de Vida&Futuro estuvo presente durante todo el procedimiento.
Al paciente se le coloca un marco fijado en el cráneo. Para ello solo se le aplica anestesia local. Esas serán las únicas lesiones que tendrá tras este tratamiento.
Este marco sirve para tomar una serie de medidas y referencias a través de tomografías. Esta información es ingresada a una computadora, donde un software especial se encarga de planificar la dosis de radiación y la ruta que seguirán los rayos durante la terapia.
Ahí es donde los especialistas se juntan para discutir cuál será el mejor tratamiento dependiendo de la dolencia del paciente. Asimismo, se deben calibrar los equipos de manera que respondan exactamente con lo programado y no se afecte con radiación zonas saludables del cerebro. Este proceso puede durar unas dos o tres horas. Tras repasar cuidadosamente el plan, el paciente llega a la sala en donde se aplicará la radiación. Se realizan las últimas mediciones y se procede con lo planificado. Esta parte puede durar entre 30 minutos y dos horas.
Es un tratamiento ambulatorio, pues luego del mismo el paciente debe descansar solo unas horas o regresar a su casa y regresar durante la noche.
“Se trata de una de las herramientas con las que cuenta el oncólogo. No suplanta a la cirugía convencional, pero ayuda en aquellos casos donde las lesiones se ubican en zonas de muy difícil acceso, en las que una operación podría dejar secuelas o en donde simplemente no se puede acceder”, explica Manolesi
A continuación les dejamos unos videitos sobre los preparativos para la primera radiocirugía que se realizó en la Clínica Ricardo Palma (Lima) y la explicación del doctor Manolesi sobre el procedimiento.
Explicación del doctor Manolesi
Bruno Ortiz B.