
Mucho hemos hablado sobre el ‘apocalipsis minorista’ en tiempos donde la inflación prima en los Estados Unidos. Target ha atravesado uno de sus períodos más complicados en los últimos meses, registrando su décima semana consecutiva de descensos en el tráfico de clientes. Esta disminución comenzó a principios de enero, tras anunciar la cancelación de su programa de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI). La decisión, que generó mucha controversia, ha afectado gravemente sus ventas y su valor de mercado.
¿Por qué se tomó esta decisión? Debido a la presión de ciertos grupos que se oponían al programa. Si bien algunos la apoyaron, muchos consumidores consideraron que esta medida dañaba la imagen de la marca. En consecuencia, el impacto en las ventas no se hizo esperar.
Desde que se tomó esta decisión, Target ha experimentado una disminución constante del tráfico a sus tiendas físicas. Los compradores han dejado de acudir a las tiendas físicas y, en su lugar, han optado por otras opciones. Esto ha afectado no solo las ventas en tiendas físicas, sino también las compras en línea, donde también se han registrado descensos.

Más de doce millones de dólares en pérdida
La cancelación del programa DEI también ha tenido un costo financiero significativo para Target. Ha perdido alrededor de $12.4 mil millones en valor de mercado desde que se tomó la decisión. Esta pérdida ha afectado gravemente la confianza de los inversores y la estabilidad financiera de la empresa. La caída del valor de mercado refleja el impacto de la controversia en torno a la eliminación del programa.
Las acciones de Target se han visto directamente afectadas por esta caída. Esta pérdida de valor refleja una crisis interna, que ahora enfrenta el reto de restaurar su imagen pública y recuperar a los clientes perdidos.
Caída estrepitosa durante la Cuaresma
Otro factor importante que ha influido en la caída de las ventas de Target es el boicot organizado por influencers. En respuesta a la cancelación del programa DEI, varios grupos comenzaron a llamar a sus seguidores a boicotear las tiendas Target.
Este boicot ha tenido un impacto directo en las ventas, especialmente durante la Cuaresma. No hay que olvidar que es un período clave para las ventas en muchas cadenas minoristas.
Durante la Cuaresma, Target experimentó una disminución en las compras, tanto en tiendas físicas como en línea. Esta caída en las ventas ha sido un duro golpe para la empresa, que depende de los ingresos obtenidos durante este período de alta demanda.

Plan de acción: las medidas urgentes que debe tomar Target
Ante esta difícil situación, Target ha comenzado a tomar medidas para intentar recuperar la confianza de sus clientes. Si bien no ha anunciado cambios inmediatos en su estrategia, se espera que la compañía lance nuevas iniciativas para restaurar su imagen. La compañía ha expresado su compromiso de volver a atraer a sus consumidores y mejorar las ventas.
El impacto de la cancelación del programa DEI continúa afectando a Target. La caída en el tráfico de clientes y la pérdida millonaria de valor de mercado la han puesto en una situación complicada. La capacidad de Target para recuperar la confianza de los consumidores y mejorar sus ventas será crucial para determinar su futuro.











