Nuevamente la base militar Fort Hood de Texas, Estados Unidos, se ve envuelta en un caso de desaparición. Esta vez se trata de un joven de 23 años de edad, el sargento Élder Fernandes, quien no aparece desde el miércoles. Tras varias desapariciones y muertes, esta base se encuentra bajo la mira de varias organizaciones latinas que han pedido boicotear el reclutamiento.
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Tras el brutal asesinato de la soldado Vanessa Guillén, esta base militar ha ocupado la atención pública. En este caso, para poder hallar a Fernandes, el Ejército está solicitando ayuda a la ciudadanía y ha dispuesto dos líneas telefónicas: 254-288-1170 (policía militar de Fort Hood) y 254-287-2722 (Comando de Investigación Criminal del Ejército de Estados Unidos).
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La alerta fue emitida por las autoridades militares de Fort Hood, donde se indicó que el sargento Élder Fernandes fue reportado como desaparecido el jueves por la noche. Esto se hizo luego de que la policía de Killeen, donde se encuentra la base, señalara que el joven fue reportado como desaparecido el miércoles.
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Según el informe policial, la última vez que se supo de Fernandes fue el lunes por la tarde cuando su sargento de personal lo dejó en su domicilio ubicado también en Killeen. Describen al joven como un hombre que mide aproximadamente 1,60 metros de altura y pesa cerca de 60 kilos. La última vez que lo vieron vestía una camiseta negra del Ejército, pantalones cortos y zapatillas rojas.
Cabe destacar que Fernandes era la víctima en una investigación sobre “contacto sexual abusivo”. Había sido recientemente había sido cambiado de unidad “para asegurarse de que recibiera la atención adecuada y de que no hubiera oportunidades de represalias”, según explicó a CNN el teniente coronel Chris Brautigam, funcionario de asuntos públicos de la Primera División de Caballería.
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“Nuestra principal preocupación es su salud y bienestar”, señala el comunicado del Ejército en redes sociales. Mientras que este viernes, la Primera División de Caballería —donde está asignado Fernandes— señaló en Twitter que en este momento no sospechan “de un acto criminal en la desaparición del sargento”.
En un comunicado de Fort Hood, se detalla que peinaron toda el área de la división, para poder añadir pistas relacionadas a vehículos, estacionamientos y edificios del cuartel general. “La unidad está en contacto con la familia del soldado, la División de Investigación Criminal del Ejército de Estados Unidos (CID, por sus siglas en inglés) y agencias civiles de aplicación de la ley para ayudar a encontrarlo mientras continuamos nuestra búsqueda”, añade el texto.
Fernandes es un especialista químico, biológico, radiológico y nuclear asignado asignado al Cuartel General y a la Compañía del Cuartel General, 553º Batallón de Apoyo al Mantenimiento del Combate, 1ª Brigada de Mantenimiento de la División de Caballería. Hallar al sargento es una “máxima prioridad para la División”, según el comunicado de Fort Hood.
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