¿Cómo está y que hacer en el Vraem?, por Rubén Vargas
¿Cómo está y que hacer en el Vraem?, por Rubén Vargas
Rubén Vargas Céspedes

Ollanta Humala fracasó ante el narcotráfico en el Vraem. Esta bomba de tiempo será la herencia para el próximo gobierno y, si no se actúa con rapidez, podría destruir varias instituciones vitales para la democracia, además de llenar las calles con víctimas del sicariato.

Se abandonó el control de los insumos químicos. Los escáneres que utilizan la Sunat y la policía están paralizados porque no se habrían renovado las pólizas de seguros. 
Tenemos el marco legal, pero no hay interdicción aérea. La reconversión productiva, a cargo del Ministerio de Agricultura, se puso como meta erradicar diez mil hectáreas de coca. Se consiguió solo mil quinientas. Devida celebra el éxito de treinta mil hectáreas erradicadas en el Alto Huallaga. Sin embargo, nunca se atrevió a ingresar al Vraem.
Cuando se descubrió que helicópteros de las FF.AA. trasladaban cocaína hasta el Callao, el gobierno dispuso que la policía reasuma el control interno del Vraem. Lamentablemente, esta decisión no fue acompañada de recursos ni de la logística necesaria. 

Después de muchas derrotas el gobierno entendió que se debía cambiar la estrategia antiterrorista y, finalmente, en el 2012 se unificó la inteligencia y las operaciones de la policía y de las Fuerzas Armadas bajo un solo comando. El resultado fue muy auspicioso. Inexplicablemente a comienzos del año se tiró por la borda todo lo avanzado. Ahora, como hace cinco años, cada institución armada tiene sus propios planes operativos y produce inteligencia a espaldas del otro. El costo de esto es la reciente emboscada en Santo Domingo de Acobamba. 

Ahora bien, ¿qué debería hacer el próximo gobierno? Necesitamos una estrategia integral con, mínimamente, los siguientes componentes

Lo más importante: clara e inequívoca decisión política para enfrentar el problema. Esto pasa por la asignación de fondos públicos para la construcción de núcleos de desarrollo humano. Mostrar “victorias estratégicas de cortísimo plazo”, como dice Porter, para tener efectos demostrativos. Generar cadenas productivas en las cuencas cocaleras teniendo como norte el mercado internacional. Agrobanco tendría que acompañar con créditos especiales y asesoramiento.

Hay que involucrar a las universidades en la investigación para dar valor agregado a estos productos. Invertir en infraestructura vial: asfaltado, puentes y trochas carrozables a nivel de los centros poblados. Priorizar la inversión en infraestructura social e incremento de los programas sociales focalizados. Fortalecer el equipo técnico y de gerentes de los municipios del Vraem.

En la parte coercitiva, aplicar un plan nacional de lucha contra el desvío de los insumos químicos fiscalizados. Crear un ‘task force’ a cargo de la Sunat, integrado por un cuerpo de élite de la policía.

Instruir a la UIF para que someta a investigaciones sumarias a una lista de funcionarios que prestaron servicio en las zonas con influencia del narcotráfico. Poner a las cooperativas de ahorro que pululan en el Vraem bajo el control de la SBS. Convertir en objetivos de alto valor a los clanes familiares que conducen grandes extensiones de coca ilegal y grifos rurales.

Finalmente, comenzar con la erradicación en zonas de menor riesgo y retomar urgentemente la experiencia positiva del ‘Comando Lobo’ bajo dirección civil.