Refugio: ¿cómo es y qué restaurantes están en este popular patio gastronómico en Surco?

¿Tienes antojo de comida? ¿Pollo a la brasa o caja china? ¿Tacos o makis? No te preocupes, sea lo que hayas pensado en Refugio debe haber una opción. Nos encontramos en el nuevo patio gastronómico de Lima que reúne a 27 restaurantes (queda pendiente la apertura de un local de comida italiana a mediados de año), con una variada oferta en más de 4.000 m2 y que busca convertirse en un oasis en medio del ajetreo de la ciudad.

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“Se ha trabajado en la experiencia para que te haga sentir que estás en una burbuja en medio del caos”, comenta Ariana Jerí, jefa de márketing de la inmobiliaria Portalia a cargo del proyecto. “Uno de nuestros conceptos es ‘juntos todo sabe mejor’ porque la idea es ir con un grupo grande, comprar en diferentes lugares pero que todos compartan juntos en la misma mesa”, agrega.

Adicionalmente, en Refugio se planean actividades para todos los públicos. Por las noches, la barra cobra nueva vida y se puede escuchar música en vivo (buscan promover a artistas independientes) o DJ a partir del jueves. En verano se dictaron talleres para los niños que planean continuar los fines de semana. Adicionalmente hay una zona de juegos para que se entretengan.

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DIRECCIÓN

Av. Javier Prado Este 4492, Surco (en la esquina de las avenidas Javier Prado y Manuel Olguín. Entre el Jockey Plaza y la Universidad de Lima)

HORARIO

Domingo a miércoles, de 7 a.m. a 10 p.m. Jueves hasta la medianoche. Viernes y sábado hasta la 1 a.m.

¿Qué comer en Refugio?

PUERTO MÁNCORA

A Christian Cornejo, la pasión por la cocina le viene por la rama materna. Sus abuelos tuvieron restaurantes en Máncora y Trujillo; su madre se dedicó a la gastronomía siempre con un emprendimiento propio. No fue casualidad que, desde los 12 años, él supiera que se quería dedicar a este mundo. Ahora, como chef de Puerto Máncora busca destacar la sazón marina y norteña en su carta.

La idea de abrir el restaurante -hace unos 20 años- fue de su madre; por ello se le rinde tributo al nombrarlo por el lugar donde ella nació. Se trata de un emprendimiento familiar en el que Christian se encarga de los alimentos y bebidas, su madre sobre todo del tema de decoración (el look and feel) y su padre de la administración. Con dos locales (en La Molina y Miraflores), se presentó la oportunidad de expandirse al entrar a Refugio: “Queríamos crecer. Nos interesó el concepto del parque que va muy bien con nuestra comida”, comenta Christian.

Los cebiches siempre están entre los preferidos y de ellos el bandera es el Puerto Máncora (con pescado, langostinos, toques de mango y palta); de allí le siguen los choritos y para compartir unos langostinos al panko. También tienen algunos platos de comida norteña (tamalito verde o parihuela vichayito) y criolla (papa a la huancaína o arroz con pollo). “Somos el restaurante de comida peruana con especialidad en pescados y mariscos; pero también con notas criollas y piuranas que son nuestras raíces”, recalca el chef.

ANTICUCHING

Si buscas carnes de alta calidad, este es el lugar. Anticuching es el concepto de street food, bajo el sello de Baco y Vaca, donde todo es “anticuchable” o, por decirlo de otra manera, todo es (o puede ser) pinchado. Desde los clásicos anticuchos, pasando por las brochetas de pollo en salsa yakitori a unas miniburguers o el choclo con queso.

Es posible que recuerdes el food truck que tenían, años atrás, que en verano se paseaba por La Curva de Punta Hermosa. Después de la pandemia abrieron su primer local en Mercado San Ramón y ahora llegaron a Refugio, siempre manteniendo la calidad en las carnes importadas: trabajan con americana (para la picaña y el cuadril de lomo), argentina (para el corazón de res) y con otro proveedor para las menudencias. Así, sus carnes se distinguen por su ternura y buen sabor.

Los más pedidos siempre serán los anticuchos; pero muy cerca vienen los cortes de cuadril de lomo y picaña, seguidos del combinado carretillero (rachi, chinchulines, mollejita de pollo y corazón de pollo con papas y choclo). El otro es el combinado gaucho (morcilla, chorizo, molleja de res y chinchulines con papas y choclo). Las cremas (de huacatay, rocoto y huancaína) son elaboradas por ellos. ¿De postre? Nada mejor que unos picarones.

La marca se interesó en ingresar a los patios gastronómicos para ser más accesibles al público. “Queremos que la gente de clase media, dispuesta a comer en patios de comida, tenga acceso a probar también la marca [Baco y Vaca]. Que no vean el restaurante como algo inalcanzable sino que Anticuching se preste para que las personas conozcan, a través de él, Baco y Vaca y disfruten su buena sazón”, comenta Julio Endo, copropietario de Anticuching.

POLLO DE LIMA

No hay nada que el peruano disfrute más que comer un pollo a la brasa en familia. Ya lo confirma la encuesta de INEI (2021), cada hogar consume un promedio de 16 al año. Al tener en cuenta el gusto local por este platillo, el grupo a cargo de Amoramar, Café de Lima y Helado de Lima decidió emprender en este nuevo rubro.

Trabajan con un horno ecológico lo que le da el crocante a la piel; mientras que la carne se mantiene suave. Prefieren mantener el condimentado bajo para darle potencia a los tres niveles de ajíes que ofrecen (del 1 al 3, van creciendo en picor). En la carta, lo principal es el pollo: entero, medio, cuarto pierna o cuarto pecho; pero lo más pedido es el popular mostrito (porción de pollo con papas y chaufa). Si te animas por un piqueo tienen sánguche de pollo a la brasa (con papas), mollejas (con papas y choclo), tequeños de pollo a la brasa y alitas tunche (las mismas de Café de Lima) en salsa agridulce picante. Van a seguir sacando propuestas para compartir.

Ellos se encuentran en Refugio como uno de los locales anclas; es decir, tienen más espacio como un mini restaurante. “La ubicación es estratégica [al costado de la Universidad de Lima y el Jockey Plaza] y nos parecía un mercado diferente a los que hay hoy en día porque son más chicos. Este es un lugar para pasar el día”, comenta Priscilla Quesada, jefa de márketing.

BARRA ARTEMISA

Al centro de Refugio encontramos la barra Artemisa: de día, ofrecen cafés; de noche llegan los cocteles. Inspirados en la diosa y la cultura griega, en la carta encontramos presencia de insumos peruanos (en frutas y algunas hierbas). Lo divertido es que puedes convertirte en tu propio barman. Se han trabajado tres líneas de mocktails (Lazo de animales, Ceremonia del té y Jardín de frutas) que puedes convertir en un trago al añadir tu destilado favorito. Trabajan con pisco, ron, vodka, gin, whisky y tequila. Casi todos los mocktails pueden ir con cualquier destilado, explica el barman Kelvin Paredes. Claro, él y sus compañeros te ayudarán si tienes dudas. Por ejemplo, el wa (hecho con té de jamaica, cardamomo y piña) va mejor con un pisco; mientras que el ninfa (con crema de coco y copoazú) va mejor con un ron. ¡Salud!

LISTA DE LOS DEMÁS PUESTOS QUE ENCONTRARÁS EN REFUGIO

Porcus, taberna criolla

Especialidad: sánguches.

Wititi

Especialidad: cocina arequipeña.

2080 Burger Place

Especialidad: hamburguesas y alitas.

Pa’Tragonia, pizzería argentina

Especialidad: pizzas.

Saltao, wok food

Especialidad: saltados.

Helado de Lima

Especialidad: helados.

Cavenecia Steak House

Especialidad: carnes.

Naruto

Especialidad: cocina japonesa (ramen).

Takosan

Especialidad: cocina japonesa (sushi y poke bowls).

Lateré

Especialidad: donuts con sabores de estación.

Caramel

Especialidad: postres caseros.

La bodega turca

Especialidad: cocina turca.

Belgofre

Especialidad: waffles.

Caja china criolla

Especialidad: carnes a la caja china.

Want

Especialidad: alitas.

Pecao, barra cebichera

Especialidad: pescados y arroces.

Chilanguito

Especialidad: cocina mexicana.

Yuuki

Especialidad: té burbuja y bingsu.

D’Chorizo y pan

Especialidad: sánguches (choripan).

El jardín de Jazmín

Especialidad: comida vegana.

La Vikinga

Especialidad: hamburguesas.

Coco crepe:

Especialidad: crepes.