Colette  Olaechea

Una forma deliciosa y saludable de disfrutar de un queque casero, perfecto para un snack o la lonchera de los chicos. No lo dejen de probar, les sorprenderá. El zapallito italiano tiene un sabor muy sutil y le aporta humedad al queque, al igual que el aceite de oliva. Le agrego limón para darle un punto cítrico y nueces picadas que le dan su toque crocante y sabor. ¡Les prometo que tendrán que alejarlo para no repetir!

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Ingredientes:

  • 1 1/2 taza de harina sin preparar
  • 1/2 cucharadita de polvo de hornear
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1 1/2 cucharadita de canela
  • 1/4 de cucharadita de Allspice (pimienta dulce molida o nuez moscada)
  • 1/2 taza de aceite de oliva extra virgen
  • 1 taza de azúcar rubia
  • 2 huevos medianos
  • 1 1/2 cucharadita de vainilla
  • 1 taza de zapallito italiano rallado (no escurrir)
  • ½ taza de nueces picadas rústicamente (opcional)

Preparación:

Colocar el aceite de oliva extra virgen en un bowl junto con el azúcar y los huevos, batir un par de minutos. Incorporar la vainilla y el zapallo italiano rallado sin escurrir (por la parte ancha del rallador, donde normalmente se ralla la zanahoria para la ensalada). En otro bowl colocar todos los ingredientes secos, pasados por un colador, e incorporarlos bien (menos las nueces). Combinar los ingredientes húmedos con los secos en forma envolvente y agregar las nueces. Colocar la mezcla en el molde de queque previamente enmantequillado y enharinado. Cocinar en un horno precalentado a 350 grados Fahrenheit (aprox 170 °C) de 50 a 55 min aproximadamente, depende del horno.

Para más recetas para niños y familia síganme todos los lunes en Provecho.

¡Por favor cuéntenme si la preparan!

Cariños,

Colette


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