Una ameba pescando [Video]
Cuando uno habla de una ameba automáticamente se nos viene a la cabeza esto…
…una cosa media amorfa que se mueve a través de proyecciones de su propio cuerpo.
Para empezar, las amebas son organismos muy simples formados por una única célula. Pertenecen al reino que engloba a todos los organismos que no son plantas, ni animales, ni hongos, ni bacterias, llamado protista. Pueden vivir en cualquier lugar pero de preferencia en el agua.
Las amebas, al no tener boca, se alimentan de una forma muy particular: lanzan proyecciones de su membrana celular llamada pseudópodos —que también las usan para desplazarse— y envuelven a su desafortunada víctima dentro de una estructura conocida como vacuola, la cual libera una serie de sustancias ácidas y enzimas que degradan completamente el alimento.
Su principal alimento son las bacterias, aunque existen algunas especies pueden llegar a infectar a los humanos y devorar su tejidos, por ejemplo, Naegleria fowleri. Si una persona nada en un estanque o piscina infestada por N. fowleri, corre el riesgo de que la ameba ingrese hasta su cerebro a través de la nariz y se lo coma lentamente, provocando una meningoencefalitis amebiana. Esta enfermedad es sumamente rara ya que sólo se han reportado cerca de 500 casos en todo el mundo. Eso sí, casi todos mortales.
Pero es una ameba llamada Entamoeba histolytica la que infecta a miles de personas en el mundo cada año. Suele alojarse en los intestinos provocando diarreas y colitis, o en el hígado formando abscesos. Cuando E. histolytica entra al torrente sanguíneo devora a los glóbulos rojos como si fueran golosinas. A este proceso le llaman eritrofagocitosis y los médicos lo utilizan para diagnosticar la amebiasis.
Sin embargo, lo que nadie se había dado cuenta hasta ahora es que E. histolytica podría capturar a sus presas a la distancia. Estas observaciones la hicieron los médicos Rito Zerpa y Alonso Soto, y la bióloga Yrma Espinoza, del Instituto de Medicina Tropical Daniel A. Carrión.
En el video podrán ver cómo el glóbulo rojo que se encuentra a una “distancia considerable” en la parte superior izquierda del cuadro se dirige rápidamente hacia la ameba, como si hubiera picado el anzuelo y estuviera siendo jalado a través del hilo para pescar.
La hipótesis que plantean los investigadores es que la eritrofagocitosis podría estar dirigida a través de estructuras proteicas que son proyectadas a manera de redes, las cuales facilitarían la captura de los eritrocitos, según comentan en la carta enviada al editor de la Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Pública. Es más, este mecanismo es empleado por células del sistema inmunológico humano (neutrófilos) para devorar a las bacterias infecciosas.
Otra interesante observación de Zerpa y sus colegas fue quepas amebas no extienden sus pseudópodos para comer (fagocitar) por cualquier parte de su membrana celular, sino que lo hacen a través de uno de sus polos. Esto podría sugerir que E. histolytica si tiene una “boca celular” (citostoma).
Es así que la eritrofagocitosis sería un proceso más complejo de lo pensado pues involucraría un mecanismo para reconocer y atraer a los glóbulos rojos, para luego devorarlos a través de una estructura celular llamada citostoma.