Christian Mistress - Possession - Relapse - 2012
Si Glenn Danzig hubiese sido mujer quizás habría cantado como Christine Davies, la vocalista de los sorprendentes Christian Mistress. Seguimos con los intrascendentes clase C porque son hoy por hoy, los mejores.Esta es una de las más originales bandas de retroheavy metal . ¿Qué? ¿Cómo es eso? si es retroheavy, ¿como va a ser original?, ¿no es eso como la cúpula cuadrada de la catedral? En cierto sentido sí.
Trataré de explicarme. Creo que Christian Mistress se vincula con un sonido de heavy metal tradicional de comienzos de los 80, esencialmente NWOBHM, pero en lugar de fotocopiar a Iron Maiden, Angel Witch o Judas Priest, recrean el sonido de alguna posible banda de ese tiempo que no existió. Alguna agrupación visagra entre esos estilos, posible pero ficticia. Es como si en una realidad alterna una banda de ese periodo hubiese sido transportada al futuro de una línea de tiempo paralela (la nuestra) en la que no existieron y pudiesen comenzar de nuevo.
Ya sé que se lee a paja mental, pero es mi forma de explicarlo. Christian Mistress es clásica y original a la vez. Allí están todas las marcas sonoras de fines de los 70 y comienzos de los 80, sobre todo de los grupos más rockeros del metal como Diamond Head o Witchfinder General. La batería es pre blast beats y aunque por momentos es veloz y algo thrashica, no llega a dispararse en una ráfaga extrema.
Sin embargo sin desdeñar a nadie, lo que llama la atención de la propuesta es la voz y la guitarra. En el primer departamente ya señalamos cierto parecido con Glenn Danzig y de allí se desprende una impronta algo punk, en realidad dark punk, en el planteamiento vocal, quizás como la de Wendy Williams de Plasmatics, pero con más educación y tenebrosidad. Una vena rockera, hasta sureña diría. La voz se mantiene en un timbre agudo y ronco a la vez, pero tiene una increíble habilidad para las melodías, la aceleración y desaceleración vocales.
Las guitarras, a cargo de Ryan Maclain y Oscar Sparber, son increíbles y es lo más original del disco. Un cruce entre Alice Cooper, Kyuss y Judas Priest. Por momentos son totalmente oscuras y pesadas y por otros, alegres y llenas de vida. Pesadez constante con pequeños riffs que son obras maestras. El sonido desmañado y casi subproducido es clave en la mezcla final.
En el plano de los temas tenemos una gran variedad, con algunos realmente pausados como el que abre el disco Over and Over o Conviction y otros más veloces como Pentagram and Crucifix pansando por rockanroleros de aire doomesco como The Way Beyond o la que da título al disco Possession (cover de los suecos doom Faith).
Algo que destacar es la onda oscura y brujeril que despide el sonido del disco, desde las voces de encantamiento y embrujo, hasta el aporte del bajo que tiende a moderar el conjunto en la energía desplegada. La imagenería utilizada por la banda en la portada es también clave en esta intención oscurantista. Una especie de mano sagrada invertida con una flama en medio, donde debería estar el orificio sangrante de Cristo y tres M dispuestas triangularmente alrrededor(una especie de blasfema trinidad) pero no en clave black satánico (ya estamos hasta las orejas de eso) sino de más del viejo ocultismo setentero del primitivo heavy metal inicial.
Creo estar ante el mejor disco del año por su originalidad, metalicidad, calidad instrumental y equilibrio. Recontra recomendado para quienes saben de metal y que este no se agota en el Big 4, Iron Maiden, Black Sabbath y Pantera. Hay más, demasiado como para simplemente ignorarlo.
Interesante y refrescante video promocional de uno de los mejores temas del disco