Overkill - White Devil Armory - Nuclear Blast - 2014
Yo no creo que este año salga un mejor disco de thrash que este, es más, la década lo va a tener difícil, pues al menos en contundencia, técnica y brutalidad este trabajo alcanza los diez puntos posibles de toda tabla. White Devil Armory llena cualquier expectativa thrasher que se precie.
Lo último que escuché que me gustó de Overkill en la época clásica fue Horrorscope. I Hear Black no me molestó, pero me pareció otra cosa; quizá interesante, pero mentiría si dijese que he escuchado este disco muchas veces. Luego tuve que esperar hasta Ironbound (2009) para oír algo de verdad bueno de la banda y ese disco fue un elocuente retorno al thrash metal tradicional con producción moderna de primera. Electric Age (2012) fue otro buen trabajo en esa misma vena, pero no me captó de la misma manera. En cambio White Devil Armory no me deja tranquilo, llevo días oyéndolo y lamentando que en las giras seguro no están tocando más de tres temas. Y eso es porque este disco es extraordinario. Ya se ha dicho que hablar sobre música es como danzar la arquitectura pero allí vamos una vez más.
White Devil Armory es la mejor clase de disco de thrash metal que quepa esperar, aquellos que son arsenales de temas completamente explosivos y que se constituyen en armas mortales que hacen volar tus sentidos y emociones de manera que solo quieres ser un ejército de un solo hombre contra el mundo. Aunque se ha ensayado thrash técnico y hasta progresivo, el mejor sigue siendo el que, más allá del virtuosismo, sigue concibiendo al metal como violencia sónica extrema, (pero no gratuita).
Destaco mucho el hecho de que no quedan casi rastros de groove ni de post thrash, nada de sonidos apanterados ni kornificaciones, acá no hay Slipknot ni Machine Head. Todo rastro del metal noventero estadounidense en el que lamentablemente cayeron por varios años (aunque no tanto como otros) ha sido desterrado como si nunca hubiera existido. Si amaste Taking Over y Feel The Fire, y volviste a gritar hail thrash metal con Ironbound, o por el contrario te preguntaste qué sentido tiene la existencia luego de escuchar The Killind Kind y sucesivos trabajos, este disco será para ti un evangelio de pura metralla más.
Luego de una pequeña intro un tanto misteriosa (no es más que ruido in crescendo), la destructiva descarga comienza con Armorist uno de los temas mejor facturados por la banda en años. Se trata de una marcha con coro y puente perfectos (cuando dice Fight figt figth like ya never did fight before) es como para agarrar a golpes a cualquier enemigo del metal). Esta clase de furia apenas y conoce descanso a lo largo del disco. El segundo tema, Down To The Bone es menos acelerado, pero se destaca por un planteamiento bastante cercano al del thrash alemán, en concreto Destruction pero sin perder la rúbrica de la banda. Sería un tanto ocioso revisar cada tema, pues todos tienen las mismas virtudes básicas. Solo destacaré dos más, Where there’s Smoke que guarda semejanza con Armorist, sobre todo en el tempo de la percusión, pero que se siente con mayor malevolencia y de una inconfundible agresividad ochentera, solo que con las mejoras de producción actual. También se destaca el último tema del disco, In the Name, que le vuelve a bajar un poco a las revoluciones pero que me recuerda ciertas pautas que alguna vez siguió Metallica.
La alineación responsable contiene a los clásicos Bobby “Blitz” Ellsworth (considerado por varios como el mejor vocalista de thrash metal clásico) y a D.D. Verni en el bajo (una verdadera arma de combate). En las guitarras está la pareja Derek Tailer y Dave Linsk que ya llevan varios discos, tanto grooves como más clásicos con la banda y a los que se les puede considerar veteranos. Cierra la formación Ron Lipnicki en la batería y miembro más reciente del grupo, ya que se unió en el 2005 y grabó Inmortalis, último de sus discos lamentables.
En definitiva un clásico trabajo de thrash metal que pese a lo tradicional del planteamiento ha sabido proyectar un aire propio y fresco (difícil asunto) con temas que tienen vida propia y que están orientados al amante fan de un género histórico.
Video de Armorist
Video de Bitter Pill