Los 11 goles de Alianza Lima que casi nadie recuerda
El 1 de noviembre de 1984 no fue un día cualquiera para el equipo de La Victoria. Aquella tarde el estadio de Matute se convirtió en una fiesta tras celebrar los 11 goles que le hizo Alianza Lima al desconocido Sport Pilsen Pacasmayo. Huellas Digitales rememora esta goleada récord que hasta el día de hoy ningún equipo peruano supera, y que pocos recuerdan.
Si es hincha aliancista y no sabía de este récord íntimo, no se preocupe, este post le refrescará la memoria. Tal vez no hinche el pecho porque no se trató de un clásico o de una victoria con un equipo internacional, pero al menos se contentará por el número de tantos que hizo su equipo. Fueron por esos 11 goles que pasaron a la historia del fútbol peruano como la mayor goleada registrada.
Al día siguiente, 2 de noviembre, el partido no podía pasar desapercibido por la prensa, tanto así que El Comercio tituló en su portada “Alianza Lima le hizo 11 goles al Sport Pilsen de Pacasmayo” como bien decía el autor de la nota: el milagro morado no fue en octubre, sino en noviembre. El equipo aliancista estaba conformado por José “Caíco” Gonzales Ganoza, Jaime Duarte, José Casanova, Tomás Farfán, Gino Peña, Juan Illescas, Teófilo Cubillas, Wilmar Valencia, Raúl Mejía, Eugenio La Rosa y Humberto Rey Muñoz. Todos al mando de Juan José Tan.
Las crónicas deportivas daban cuenta que Alianza Lima comenzó el partido sin apresurarse, pero a los 18 minutos ya había asegurado el triunfo con anotaciones de Illescas y Valencia. Luego en el lapso de tres minutos entre el 26 y 29 anotaron sucesivamente Mejia en dos ocasiones y Rey Muñoz. Al minuto 41 llegó el gol del experimentando Teófilo Cubillas, quien no podía dejar de brillar en su casa. Así terminó el primer tiempo con 6 goles a 0. Durante el entretiempo las apuestas empezaron a correr. ¿Cuántos goles más harían los aliancistas? Se preguntaba la afición.
Ya en el segundo tiempo terminaron de rematar al equipo liberteño. “El Nene” andaba suelto en plaza, libre de marcación; y en el menor descuido de Sono, el arquero del Sport Pilsen, hizo dos goles más. Tanta era la confianza que tenían los blanquiazules en el césped que su director técnico Juan José Tan se dio el lujo de cambiar a Teófilo Cubillas por el juvenil César Susoni y a Wilmar Valencia por Jorge Cordero.
A poco tiempo de finalizar el encuentro llegaron las tres últimas anotaciones a cargo de Mejía, con dos goles, y La Rosa con un solo tanto. El marcador final fue de 11-0. Lo anecdótico de ese partido fue precisamente el marcador, pues hubo problemas para colocar el gol número 11, pero eso no fue impedimento, invirtieron el número 7 para lograrlo.
Teófilo Cubillas y José Gonzales Ganoza formaron parte del equipo que goleó al cuadro norteño.
Después del pitazo final, los 1389 espectadores, en su mayoría hinchas aliancistas, hicieron vibrar el Matute. El Rodillo Negro había vuelto más aplastante que nunca, mientras que el indefenso Sport Pilsen de Pacasmayo regresaba a su norte querido con mucha pena y sin nada de gloria.
Si bien no fue la mejor actuación del equipo blanquiazul, lograron una goleada que pasó a la historia. Al final de aquella temporada, la decimoctava fecha del Torneo Descentralizado, los resultados quedaron así: Sport Boys dominó y quedó puntero, Alianza Lima quedó en tercer lugar y el Sport Pilsen fue el colero absoluto, se sabe que al poco tiempo descendió a la Copa Perú.
En 1994 Sporting Cristal estuvo cerca de igualar la marca en un encuentro ante Defensor Lima, pero terminó con un 11-1. ¿Cuál será el equipo que superé la marca?
(María Fernández Arribasplata)
Foto: Archivo Histórico El Comercio