¿Tenemos equipo?

La mano de Capitano ya se empieza a sentir, al menos dentro del campo de juego: dos triunfos seguidos, el último por goleada y con un fútbol menos amarrete que de costumbre han despertado cierto entusiasmo. Fuera de la cancha, la mano de Salvador –y la de los dirigentes- también empieza a sentirse: Píriz -ahora sí- está cerquísima de irse. Y no sería el único en partir.

Muchachos, muchachas, explíquenme, ¿qué hacemos con Piero?

Bajo el rótulo “no está en los planes del técnico” Víctor Píriz, Carlos Orejuela y Adrián Zela dejarían la crema antes de la liguilla. Nelinho Quina acaba de ser cedido al Aurich y, al cierre de esta nota, el Werder Bremen no decidía la incorporación de Juan José Barros. Si bien ninguno de estos jugadores estaba dentro de la consideración del argentino, esta circunstancia y la necesidad de recortar la plantilla parecen haberse encontrado en el momento oportuno .

El futuro económico de la ‘U’ es una moneda al aire. Lanús acaba de descartar la incorporación de Galliquio y ‘Tyson’ -salvo algún cambio de último momento- se quedará en Ate. El campeón necesita ingresos para poder seguir viviendo y a la fecha no asoman los canales para obtenerlos.

Pero dejemos por un momento los problemas de la institución y centrémonos en lo futbolístico. ¿Ya se nota la mano de Capitano? Creo que sí. El equipo ya no es tan obsesivo para recuperar la pelota -lo cual, a mi entender, es más malo que bueno- y adelante hay más libertad creativa (el gol de Labarthe fue la mejor expresión de ese nuevo estilo). Aunque no debemos olvidar que delante tuvimos a un once que dejó demasiados espacios de tres cuartos para atrás y arriba se mostró muy livianito, el campeón se olvidó de los centros y buscó elaborar jugadas ofensivas con pelotas al ras. ¿Juega mejor que en la era Reynoso? No nos vayamos a los extremos. Hay otra idea de juego, más cercana a lo tradicional, pero resulta prematuro hacer alguna afirmación de ese tipo. Además, no sabemos si mostrará la misma consistencia ante rivales más poderosos. Esta semana toca Alianza Atlético, uno de los coleros, y solo sirve ganar para acortar las diferencias con San Martín y tratar de clasificar al grupo de los pares, la mejor opción para mantener firme la opción del bi en el horizonte.

Párrafo aparte merece Piero Alva. Como dijo Miguel Villegas en su crónica del lunes, las críticas solo consiguen fortalecerlo. Sus dos golazos confirman que podemos decirle mil cosas en la cancha y fuera de ella, insultarlo de la peor manera, pero con la crema en el pecho Piero mata. Y nos hace celebrar.

¿Qué piensan ustedes, ya se siente la mano de Capitano?
¿Alcanza con lo que tenemos para luchar por el título?
¿Qué les pareció Gigena?
¿Qué hacemos con Piero Alva?

Un abrazo para todos.

P.D. El retraso del post es culpa mía. Mil compromisos me impidieron escribirlo la noche del domingo, tal como quería. Espero no volver a demorarme.