El enemigo está en casa
“Empata Inti Gas con un golazo. El 2010 se acaba de terminar para la ‘U’”. Ese fue mi último tuit (@orbisa35) luego del soberbio tiro libre de Franco Mendoza y lo reafirmo. A pesar de que el corazón me dice que no debo bajar la cabeza, que la pelea no ha terminado aún, la realidad me grita que no hay manera de cambiar esta triste situación. Además, dentro del club están haciendo todo lo posible para que así suceda.Del nivel futbolístico del equipo no vale la pena hablar. Lo grave fue que a la conocida escasez de ideas se sumó una apatía vergonzosa, que hizo del primer tiempo un partido en cámara lenta. Frente a un equipo que jugó con un solo punta y se abroqueló atrás, la crema se movía con una lentitud desesperante, como si no estuviese jugándose la clasificación a la Libertadores. Las cosas mejoraron un poquito en la segunda etapa, pero el tanto de Mendoza nos calló la boca a todos.
Cuando Reynoso dirigía al club, la ‘U’ tampoco hacía muchos goles, pero marcaba diferencias. Paso a ennumerar algunas:
1.Sabía a qué jugaba. Se notaba un equipo trabajado, concentrado, con una envidiable solidez defensiva, que priorizaba la recuperación de la pelota para salir en velocidad en busca del arco contrario. Al estar en permanente movimiento, los jugadores marcaban los espacios, no esperaban que la bola llegase a sus pies. ¿Alguien puede explicarme a qué juega el equipo hoy?
2.El factor Solano. Si no se conseguía un gol con una jugada elaborada, aparecía Solano para habilitar con un buen servicio (no siempre, es cierto) o con una pelota parada. Gran parte del campeonato 2009 se lo debemos a los centros teledirigidos de Ñol. Y cuando estaba ausente, Fito intentaba hacerlo olvidar. Hoy la ‘U’ extraña a los dos.
3.Como un solo puño. El equipo mataba por Reynoso y el proyecto, a pesar de las críticas y los innumerables desatinos dirigenciales. Se fue el ‘Cabezón’ y cuando empezaba a sentirse la mano de Capitano, nuevamente vino la tormenta y llegó Chemo. Hoy la crema luce desconcertada, con la cabeza en otro lado, como si sus jugadores estuvieran esperando el final del año para buscar nuevos horizontes.
DESATINOS DE SIEMPRE
Chemo no le ha tomado la mano al equipo y su libreto asoma escaso frente al material que tiene a la mano. Además, el rendimiento de jugadores como Fernández, Ruidíaz, Labarthe, Alva o Galván ha descendido bruscamente. Añádanle la intrascendencia de Ramírez o la irregularidad de Miguel Torres y Rabanal, de la que por ratos parecen contagiarse Toñito y Rainer Torres.
Y en momentos en los que debería primar la serenidad, a fin de no tomar decisiones que afecten aún más la estabilidad del plantel, aparece Julio Álvarez -vocero de la Junta Transitoria- para cuestionar la permanencia de Del Solar y críticar con calificativos muy desatinados a Fernández y Ramírez. La cereza de la torta fueron las declaraciones de Julio Pacheco, que le quitaron piso a Álvarez. Mientras tanto, las noticias del supuesto interés por el ‘Muñeco’ Gallardo o la vuelta de Johan Fano inundaban los medios para burla de nuestros rivales.
En el reparto de responsabilidades, tanto Chemo como el plantel tienen una gran porción de culpa, pero sigo pensando que el pedazo mayor pertenece a los dirigentes. La famosa Junta Transitoria -que de transitoria no parece tener nada ya que de las elecciones sigue sin hablarse- supuestamente debía traer tranquilidad a la institución, sin embargo, lo único que está consiguiendo es que la sensación de desgobierno siga acrecentándose y el descrédito del club no se detenga. Lo que estamos viendo en la cancha es un reflejo de todo ello. Ojalá ganemos el clásico y la providencia nos ayude para clasificar a la Libertadores o la Sudamericana. Vamos a necesitar toda la ayuda divina porque, a la luz de los hechos, con lo que tenemos no alcanza.
Espero sus comentarios.
Un abrazo para todos