Los unió las ganas de hacer música y de pasarla bien. La amistad llegó después. A mediados de 1986, en la época de oro del rock nacional, nació Trama, agrupación formada por Luciano Figallo, Felipe Martin (bajo), Polo Cox (teclado) y Paul Rolando. En sus inicios fueron conocidos como los Soda Stereo peruanos por el parecido de su sonido y ‘look’. Casi cuatro décadas después, su vocalista recuerda que estas comparaciones llegaron con severas críticas que afectaron a la banda, y rememora el día que conoció a Gustavo Cerati y los consejos que el astro argentino le dio.
“Sufrí muchísimo por las críticas. Decían que éramos copiones, que copiaba a Cerati y que por eso nuestra propuesta no tenía valor. Luego nos enteramos que detrás de esos ataques había una especie de confabulación por la rivalidad de dos emisoras radiales. Nosotros teníamos contrato con una de ellas. Terminé en un fuego cruzado en el que la víctima fui yo”, asiente Figallo.
Antes de ser la voz, Luciano Figallo fue el guitarrista. Cuenta que asumió el cargo obligado por las circunstancias, luego que el cantante diera un paso al costado cuando la banda estaba a punto de consolidarse.
“Justo cuando nos quedamos sin cantante, habíamos conseguido un manager, una disquera y un contrato en una radio. Necesitábamos un reemplazo urgente. Probamos a varios que ahora son conocidos, como a Wicho García (Mar de Copas), pero ninguno quería tocar con nosotros porque todavía no teníamos nada o no entendían lo que queríamos hacer. Yo quería a Nina Mutal, pero nadie del grupo estaba de acuerdo con mi propuesta”, recuerda.
“La búsqueda continuó, hasta que un día me preguntaron si quería ser el cantante. La idea no me hizo mucha gracia, pero acepté porque teníamos todo encima: una disquera, un contrato y el banner listos. Asumí una gran responsabilidad. Y para no decepcionar, me busqué una asesora de canto. Me preparé”, aclara.
Soda Stereo fue una importante influencia musical para Trama. Figallo reconoce que su admiración por Gustavo Cerati creció el día que lo conoció, durante la primera visita de la agrupación argentina a nuestro país, en 1986.
“Vinieron para tocar en el Coliseo Amauta. Los conocimos de suerte. Después de la prueba de sonido le dijeron a quien los acompañaba, me parece que era Julio Andrade, que querían tomar una cerveza y conversar. Pero como en esa época los bares estaban cerrados por el toque de queda, llegaron al lugar donde estábamos ensayando con un millón de chelas”, narra.
“En ese entonces, ellos no eran tan famosos. Esperaron educadamente que terminemos de tocar, luego entraron. Nos dijeron que tenían una grabación que querían que la escuchemos. Era ‘Signos’. Todavía no estaba terminada. Cuando empezó a sonar la guitarra de esa canción, le pregunté cómo había hecho. Me enseñó un truco que desconocía”, confiesa.
Entregas musicales
Trama tiene tres discos: Trama (1987), Sombras en la noche (1989) y De Colores (2007). La primera entrega fue grabada íntegramente en estudios de Chile con la colaboración de varios músicos chilenos pertenecientes a las bandas Upa! (Pablo Ugarte y María José Levine) y Viena (Pedro Frugone). Este trabajo fue calificado como “el más grande proyecto del rock nacional. Temas como “Un paso más”, “Como cambias de color” y “Un ovni en mi jardín” sonaron con fuerza en las radios nacionales.
“Tenemos grabadas como 30 canciones, pero compusimos como 100. No llegamos a grabar todas porque el grupo perdió vigencia. Nos seguimos reuniendo, tocando, pero esporádicamente y no todos los integrantes”, subraya.
Luciano Figallo formará parte de los artistas que participarán en el “Rockas, El festival de los 80s”, el próximo sábado 2 de marzo en el anfiteatro del Parque de la Exposición.