
La tercera y última temporada de “El Juego del Calamar” no escatimó en sorpresas, pero una de las más impactantes fue, sin duda, el nacimiento del bebé de la Jugadora 222, Jun-hee, en pleno juego mortal. Los fanáticos ya estaban intrigados desde que se reveló que la joven estaba embarazada del Jugador 333, Myung-gi. Sin embargo, nadie esperaba que el parto ocurriera justo durante el desafío de las escondidas, ni que el recién nacido fuera completamente generado por computadora.
Jo Yu-ri, la actriz detrás de Jun-hee, había adelantado que “nunca se puede descartar ninguna posibilidad” cuando se le preguntó si el embarazo podría cambiar el destino del personaje. Pero la historia fue por un camino mucho más oscuro. Lejos de generar simpatía o protección, el bebé CGI aparece en medio del caos y apenas provoca reacción en los demás jugadores, en una escena tan extraña como simbólica de la frialdad del universo de “Squid Game”.

¿POR QUÉ NO UTILIZARON UN BEBÉ REAL?
El uso de efectos visuales para representar al bebé ha generado debates entre los espectadores, muchos de los cuales se preguntan por qué no se recurrió a un actor infantil. La respuesta, aunque sorprendente para algunos, es bastante lógica: la producción enfrentaba condiciones de rodaje extremas, con sets complejos, largas horas de grabación y escenas peligrosas. Introducir un bebé real habría sido un desafío logístico y, sobre todo, un riesgo innecesario.
Además de las acrobacias y el ruido que implican las escenas, filmar con bebés siempre es complicado por su naturaleza impredecible. Llantos, pausas frecuentes para dormir y alimentarse, o la necesidad de múltiples gemelos para un solo papel hacen que sea una decisión de alto impacto en cualquier rodaje. Si algo no encaja con la agenda de una superproducción de este calibre, es la rutina de un recién nacido.
En ese sentido, la opción de un bebé CGI se presenta como la solución más segura y funcional. Aunque el resultado no haya sido del todo convincente para algunos, evita comprometer el ritmo narrativo y garantiza que las escenas más extremas se desarrollen sin contratiempos ni riesgos para menores.

QUE PAREZCA UN VERDADERO RECIÉN NACIDO
Por otro lado, es posible que el director Hwang Dong-hyuk buscara un tipo específico de realismo visual. Los bebés reales utilizados en cine suelen tener algunas semanas o meses, mientras que el recién nacido de Jun-hee necesitaba parecer exactamente eso: un bebé que acababa de llegar al mundo, frágil y completamente nuevo, lo que puede haber motivado la creación digital desde el inicio.
Algunos fans han sugerido que una combinación de técnicas —usar un bebé real para las tomas estáticas y CGI para las escenas de acción— habría sido una opción más realista. Sin embargo, mantener la continuidad y coherencia visual entre ambas versiones del bebé puede volverse un rompecabezas en la sala de edición. En este caso, apostar por el CGI de principio a fin fue, posiblemente, la vía más sencilla.
¿Te apasionan las series y películas? Sigue nuestro canal en WhatsApp para recibir las novedades más comentadas directamente en tu celular 👉Únete aquí.











